El poder del pensamiento flexible
El título del trazado tiene su origen, en la obra escrita por el psicólogo, escritor y maestro universitario, que vale la pena comentar sobre sus aportaciones entre una mente rígida a una mente libre y abierta al cambio. La fuerza del pensamiento flexible radica en que, a pesar de la resistencia y los obstáculos, nos permite inventarnos a nosotros mismos y fluir con los eventos de la vida sin lastimar ni lastimarse. Como podrá verse en este libro, la rigidez psicológica enferma, genera sufrimiento, estrés, depresión, ansiedad, hostilidad y promueve una violencia individual y social significativa. Por eso, es incomprensible que muchas culturas avalen y promuevan el dogmatismo y el fundamentalismo en cualquiera de sus manifestaciones principales como un estandarte a seguir. Si decides aferrarte a tus dogmas de manera irracional, tendrás una vida empobrecida y dolorosa.
La mente flexible fortalece el yo, actúa como un factor de protección contra las enfermedades psicológicas, genera más bienestar y mejores relaciones interpersonales, y nos acerca a una vida más tranquila y feliz. Si decides ser flexible, te quitarás un enorme peso de encima al ver que nada esté predeterminado y que puedes ser el último juez de tu propia conducta.
Se percibe mucho las mentes rígidas en personas que trabajan en el sector público y privado al tomar decisiones, existe una lucha constante entre lo justo e injusto, lo moral y lo inmoral, lo ético y no ético con frecuencia pierden objetividad, porque la mente razona bajo pensamientos rígidos y no flexibles que los hacen incurrir en error, por lo tanto, es importante tener estrategias a favor de una mente flexible. ¿Cómo? Explorando la realidad, mantenerse actualizado, investigar y profundizar en diferentes temas, tener experiencias nuevas, escuchar a los opositores, controvertir argumentos y no atacar a las personas, promover actitudes democráticas.
Voy a comentar el caso de una mente rígida, una acusada, se le imputaba el delito de violencia y resistencia a la autoridad, la madre sin autorización del juez y sin el consentimiento del padre, se había llevado a su menor hijo fuera del país, incumplimiento, el régimen de visitas, la tenencia del menor, que la tenía el padre y no podía ejercer la patria potestad, haciendo caso omiso, a los requerimientos del juez de familia, para que entregara al menor hijo a su progenitor, la madre acusada, abusando del régimen de visitas que le había ordenado el juez de familia, a favor de su menor hijo, sostuvo, que como lo tenía en su poder vio por conveniente llevarlo al exterior del país sin autorización alguna, sin comunicar al juez, ni al padre que tenía la tenencia del hijo, llego el momento de la acusación, en que el fiscal formuló acusación por haberse acreditado el delito y la responsabilidad, frente a la evidencia de pruebas irrefutables, la defensa hizo lo propio, sin embargo, el juez, le impuso una pena condicional con reglas de conducta, sin disponer que la sentenciada proceda a entregar al menor a su padre, bajo apercibimiento de revocársele la pena condicional por efectiva; y cuál fue su argumento que no podía ordenar que la madre sentenciada entregue a su hijo al padre por ser la madre, violando todo principio de legalidad, la tutela jurisdiccional efectiva, el debido proceso, se apeló, se revocó la sentencia en segunda instancia, se ordenó que el menor sea restituido al padre y sancionaron a ese mal juez por sus ideas rígidas y prejuiciosas.
El presente caso, es uno de mente abierta, un acusado, se le imputaba el delito de violación en estado de inconciencia por la víctima, porque en el examen toxicológico le encontraron benzodiazepina, un ansiolítico, que tomaba la agraviada para su sistema nervioso, sin embargo, participo en todos los eventos con el imputado y fue absuelto por insuficiencia probatoria.
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