El valor internacional de la vacuna

No hay duda que en los últimos meses, cuando asume la Cancillería Allan Wagner, las vacunas comenzaron a llegar en forma ordenada, y se puede ofrecer a los peruanos una inmunización con productos de alta calidad.

Esto es importante, porque la vacunación no solo tiene un efecto local e inmediato, que es el de preservar al que la recibe de un proceso infeccioso severo, sino también el de evitar contagios no solo a nivel nacional. En este contexto en Europa ya se está planificando una suerte de pasaporte para el vacunado, que le permite viajar, o dedicarse a actividades que antes estaban restringidas. Es entonces importante que el ciudadano peruano reciba una vacuna que sea valorada internacionalmente. La vacuna china, por la que algunos peruanos perdieron hasta su dignidad, no sería aceptada en la Unión Europea, lo que significaría que tendrían restricciones si desean desplazarse al Viejo Continente.

Según publican los diarios, 70 mil peruanos ya viajaron al exterior. Y más de la mitad –los que pueden- de los limeños desean desplazarse a otros países para recibir una vacuna.
Hace un año, se vislumbra este panorama, por lo que se trató de impulsar el Mecanismo de Acceso Mundial a las Vacunas contra la Covid-19 (Mecanismo Covax Facility). y las Naciones Unidas declararon que la vacuna es un bien público. Ahora debemos seguir de cerca la tendencia de inmunización universal. Un paso importante para ello es la propuesta del presidente Biden y otros líderes para liberar las restricciones de patentes comerciales.

No es un gesto altruista, sino un cálculo en el que prevalece el criterio de que es preferible limitar las ganancias de un laboratorio que arruinar la economía. Una vez que los ciudadanos de los países industrializados estén vacunados, habrá un esfuerzo de los gobiernos para que en todos los países se haga lo mismo. No solo para evitar rebotes de contagios en los países ricos, sino por el hecho mismo que los países pobres son mercado para sus productos industrializados en tanto que dependen también de materias primas o alimentos de los menos desarrollados.

La pandemia posiblemente haya causado más de diez millones de muertos en el mundo, en tanto otros cien millones fueron gravemente afectados en su salud con secuelas, y mil millones de habitantes de nuestro planeta están siendo arrastrados a la pobreza. Las cifras oficiales quieren ocultar esa enorme pérdida. La desesperación causa migración; hay 75 millones de personas que buscan refugio. Los gobiernos no quieren admitir los fracasos de la política. En el Perú se puso énfasis en restricciones, llegándose a extremos irresponsables de retrasar la vacunación por las elecciones. Max Weber decía que los políticos buscan el poder en tanto que los científicos la verdad. Se nota ello cuando no se promocionan los logros de los científicos. En el Perú no se conoce quién es Ugur Sahrin, el alemán que inventó la vacuna más eficiente de BioNTech y se ignora que se encuentran en Alemania otras investigaciones avanzadas para ofrecer medicamentos o una terapia. Uno de los trabajos está dirigido por el doctor Dirk Neumuller de Biotest y el otro por el Dr. Ahmed Scheriff de la farmacéutica Petracor.

Estos métodos de combatir el virus cuando ya el paciente está infectado superan el costo de las vacunas. Por ello, hay que promover la vacunación. Como lo digo en mi libro Nuestra Constante Lucha, posiblemente el 2022 las vacunas se repartirán en forma gratuita en todos los países.

En este mundo en que la información y la oportuna negociación puede salvar vidas, es muy importante la labor que realiza en forma silenciosa y eficiente nuestra diplomacia.

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