Empresas, exportaciones y competitividad
Los nueve objetivos prioritarios de la Política de Competitividad y Productividad y sus 36 lineamientos asociados nos brindan una idea de lo complejo que es la tarea de ser más competitivos y productivos. Pese a ello, hay indicadores que resumen de manera sencilla toda esta complejidad y nos ayudan a tener una idea objetiva sobre cómo estamos evolucionando en esta materia.
Partimos de la idea de que las exportaciones de un país son el indicador más simple y completo de su competitividad, ya que los costos y los márgenes de utilidad sintetizan todas las capacidades y debilidades inherentes a las empresas y también las de su entorno.
En esa misma línea, si la empresa es el actor protagonista del mercado, su comportamiento en el mercado internacional revela también la competitividad de un país. Es más, la presencia de la empresa en el mercado nos permite probar su capacidad de respuesta, tanto a escenarios positivos como a escenarios adversos como los que hemos tenido en años anteriores.
Por ejemplo, en el año 2012 (con el valor exportado más alto anterior al del 2018), el número de empresas exportadoras no tradicionales fue de 7,571. Luego de cuatro años de caída, las exportaciones no tradicionales llegaron a su nivel más bajo en el 2016. Ese año, el número de empresas exportadoras bajó a 6,869. Una reducción de 702.
Sin embargo, los verdaderos indicadores de competitividad de nuestras empresas son las entradas y salidas de empresas del mercado. En esos cuatro años, las empresas que entraron a la actividad exportadora fueron 3,850 (963 empresa por año en promedio). Lamentablemente, en el mismo periodo salieron de la actividad exportadora 4,552 empresas (1,138 empresas por año en promedio).
Una tasa de ingreso de nuevas empresas de 51% revela un alto espíritu emprendedor del peruano, pero una tasa de mortalidad de 60% nos dice que las ilusiones empresariales mueren pronto debido a que no tenemos las condiciones competitivas para afrontar un contexto negativo como el vivido hasta el 2016.
Desde el 2017 entramos a una etapa de recuperación. En ese contexto positivo se sumaron a la actividad exportadora 3,148 empresas. Son 1,574 empresas nuevas en promedio por año, que revelan que la dinámica emprendedora se acelera cuando los vientos son positivos.
En ese mismo período, las empresas salientes fueron 2,792, lo que en términos anuales representa una salida de 1,396 empresas por año, superior a las 1,138 empresas que dejaron de exportar en los tiempos de crisis. La conclusión cae por su propio peso: en los mejores momentos del contexto internacional, el Perú perdió competitividad. Hablan las estadísticas.
(*) Presidente de ADEX