¡Enfrentar a los delincuentes con eficiencia!
No obstante que reiteradamente diversos sectores formulan públicas peticiones para que las entidades estatales combatan eficientemente a la delincuencia, resulta que, pese al esfuerzo de la Policía Nacional, los delincuentes —organizados en bandas— siguen extorsionando, intimidando, raptando y no solamente hurtan y roban, sino que diariamente, utilizando sicarios, están asesinando y colocando explosivos en lugares públicos.
Se ha señalado que “la Policía Nacional está desbordada, hay falta de oficiales (jefes) operativos y con estrategias claras”, que “la inteligencia policial está ausente”, que “falta liderazgo estratégico (hay generales sin experiencia en investigación criminal)”, que “los penales son el centro del crimen organizado: sin control, pues las estrategias y delitos se dirigen desde el interior de las cárceles”. También se ha expresado que “el narcotráfico, la minería ilegal y el contrabando impulsan comicios violentos en cinco regiones clave” (sic). Estas afirmaciones periodísticas son consideradas veraces por la sociedad.
En Expreso, hemos opinado que los políticos del Legislativo y Ejecutivo deben tener la capacidad suficiente para fortalecer los servicios de inteligencia a cargo de la Policía Nacional. Esto importa, primeramente, que se aprueben con carácter de emergencia y urgencia partidas presupuestales para que de inmediato se fortalezca la formación de cuadros policiales expertos en servicios de inteligencia.
Esto requiere que, de inmediato, se amplíen en las escuelas policiales las áreas dedicadas a formar más (y en número suficiente) cuadros que en poco tiempo realicen sus labores de inteligencia contra el crimen. También es necesario, de inmediato, aumentar el actual número de cuadros policiales especializados en inteligencia contra la delincuencia. Todo ello para que salgan a combatir eficazmente a los delincuentes. Esto es imprescindible.
También se requiere que el Legislativo apruebe la modificación de la tipificación de los delitos en el Código Penal y/o leyes penales específicas y que se incremente (con severidad) el tiempo de pena para cada delito. Además, se debe establecer que, en los procesos a cargo del Ministerio Público y luego en el Poder Judicial, no se conceda libertad a los detenidos capturados por la Policía Nacional, quienes deben ser procesados penalmente de inmediato. Es necesario disponer que los condenados devuelvan a sus agraviados los bienes que les han hurtado o robado, y que también paguen la reparación civil correspondiente.
En los establecimientos penales, deben implementarse sistemas que impidan que los detenidos puedan usar celulares y/o sistemas electrónicos para comunicarse con el exterior.
¡Es hora de enfrentar con eficiencia a los delincuentes! ¿Habrá la capacidad de hacerlo?
Mira más contenidos siguiéndonos en Facebook, X, Instagram, TikTok y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.