Es necesario cuidar la salud mental
Salud es, sinónimo de sentirse bien en forma integral, física, psicológica y espiritualmente, pero lo más importante es la salud mental, sin dejar de lado que otros aspectos del cuerpo humano son fundamentales, empero, la mente hay que cuidarla desde que el ser humano se encuentra dentro de vientre materno hasta la extinción de nuestros días.
Es importante tener presente la predisposición genética, hereditaria y medio ambiente, donde se desarrolla la persona; si el medio ambiente es tranquilo, armonioso, de comunicación, respeto, lleno de cariño y amor, la personalidad que se va a desarrollar es equilibrada. Cosa distinta es cuando el medio que se desarrolla la persona es hostil, tenso, lleno de conflictos, agresivos, de violencia, de maltrato, de castigo emocional frecuente, pues se construye una personalidad con desajustes psicológicos profundos, inestables, desconfiados, celosos, bajo concepto de uno mismo, desadaptado para incorporarse y socializarse con las personas, por lo general, estás personas necesariamente necesitan asistencia de salud mental para manejar sus conflictos emocionales y supervivir en el mundo que conviven y evitar que los problemas se vuelvan crónicos y desencadenen en un suicidio.
Les voy a comentar el caso de Carlos, hijo único; nació y se desarrolló en un ambiente en que los padres eran demasiado rígidos, desconfiados, prejuiciosos, desarrollando un trastorno de personalidad obsesiva sobre la limpieza, porque consideraban que todo se contaminaba, inclusive guardaban las cosas en la nevera por precaución. Este patrón de conducta que, insertado en el hijo, potencialmente más severo, que desencadenó muchos problemas en la escuela, se lavaba las manos constantemente, no socializaba adecuadamente con los compañeros, era víctima de bullying, burlándose de él constantemente. Sin embargo en el área cognoscitiva se encontraba dentro del promedio. Ustedes se preguntarán si emocionalmente estaba afectado, pues rendía intelectualmente. Pero son dos aspectos distintos, que si no se abordan oportunamente, pueden relacionarse. Tenemos grandes ejemplos de sabios, escultores, pintores, que emocionalmente estaban desequilibrados pero producían intelectualmente.
Este joven Carlos, al término de su educación primaria, fue cambiado a otra escuela donde estudio la secundaria, donde se encontró con compañeros de la otra escuela, que sabían su problemática, estaban más maduros, sin dejar de vez en cuando molestarlo, pero la vida escolar continuó. Recuerdo de este alumno su color de piel blanco leche y llamaba la atención en el curso de educación física, las bromas iban y venían y el instructor ponía orden y los alumnos dejaban de molestar, y pasó el tiempo, me encontré con este amigo y compañero de colegio, que había estudiado y graduado en psicología y estaba asimilado a la Policía Nacional del Perú, con el grado de Capitán, en ese entonces, creó que llego hasta General, nos reuníamos algunas veces, era un buen amigo, buenos sentimientos, le pregunté por qué había escogido la carrera de psicología, me contestó para manejar mi vida interior; respuesta más sabia no pudo ser. Dentro de la conversa, le pregunte si había formado familia; me dijo que no. Inclusive se había casado, pero se divorció; la pareja que escogió estaba interesada en el patrimonio que tenía Carlos. Le pregunté por qué escogiste esa pareja, y me dijo que era cinturón negro en artes marciales y le daba seguridad.
Estamos frente a una persona que estudió y se graduó de psicólogo, se asimiló a la policía, sin embargo, se sentía inseguro y necesitaba mucha protección, quizás la sobreprotección que le otorgaban sus padres. Por eso, “cuida tú mente más que nada en el mundo, es fuente de vida”.
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