¿Hay futuro tras la tragedia?
La razón por la que el régimen Vizcarra es culpable de la grave crisis a la que, tanto nuestra Sanidad como nuestra Economía, han llegado en este primer trimestre, es que ha ejecutado muy mal las cosas. Repasemos la historia. Pese a las tropelías de un Humala decidido a quebrar el Perú bramando aquel “agua antes que oro” –que acabó con el desarrollo de la minería peruana- y a “cambiar el sistema” (esto último quizá a instancias de Vargas Llosa, quien lo aupó a la presidencia para aniquilar el último gen fujimorista en el país, por su insaciable sed de venganza tras la derrota que le infligiera un “japonesito que copió mi sistema”), el Perú resistió el embate de dos gobernantes funestos, ambos imputados por corrupción. Y como no nos cansaremos de repetirlo, fuimos la nación estrella sudamericana de los noventa. A que extremo llegaría nuestra solidez que pese el affaire Odebrecht que ralentizó severamente nuestro progreso, en 2019 crecimos el doble que Chile y uno por ciento debajo de Colombia.
Pero durante el primer semestre de este año mientras la economía peruana se contrajo -3.4%, en Chile subió 0.4% y en Colombia creció 1.1%. Ojo, Chile con 19 millones de habitantes arrancó sufriendo los efectos del Covid-19 con mucho mayor severidad que el Perú; después rectificó sus yerros y controló los indicadores, al extremo que ayer estuvo por debajo de los nuestros (105,000 contagiados y 1,113 fallecidos). Y Colombia, con casi 50 millones de habitantes, ayer anotó 29,383 infectados y 939 fallecidos. A todo esto, Perú con 30 millones de pobladores ayer registró más de 164,000 infectados y 4,400 fallecidos. Las cifras afianzan todo. El régimen Vizcarra maneja con los pies esta crisis de Salud. Pero además, nos ha inducido al desastre económico al haber perdido 3.4% del PBI en el primer trimestre, mientras dos vecinos crecieron en ese mismo período. Ya está pronosticándose que nuestra caída del PBI en el trimestre abril, mayo, junio alcanzaría 10.5%. Una eventualidad devastadora. Eso sólo implica que el gobierno Vizcarra es un reverendo incapaz como gestor. No lo dice este escriba. Lo corroboran los guarismos de las estadísticas. Y cuidado que se estima que el catastro peruano de muertes y contagios por la epidemia refleja apenas la tercera parte de la realidad.
Los astros se han alineado, además, para agravar esta trágica coyuntura en la que se ubica nuestro país. El Perú está gobernado por un Ejecutivo fallido y por un Legislativo incalificable ¡precisamente en pleno período preelectoral! Por si fuera poco, los progre-marxistas que manipulan a Vizcarra lograron su objetivo: destripar al Apra desde que Humala pusiera a una hiena a investigar a García denigrándolo mañana, tarde y noche durante un lustro; y practicándole un bulling insaciable al fujimorismo. Con ello la zurda acabó con los dos partidos con arraigo popular que, sin duda, representaban al voto mayoritario del centro derecha. Lamentablemente, tal como está, Acción Popular es un furgón de cola del progre marxismo que hoy está solo en cancha. ¿Sabrá realinearse?