Implementación del programa de prevención del delito
La Presidenta de la República en su mensaje del 28 de julio en materia de seguridad ciudadana, señaló que se ha implementado el “Plan Perú Seguro”, como una estrategia integral orientada a restablecer el orden interno, proteger a la ciudadanía y fortalecer el estado de derecho en todo el país, el mismo que tiene cuatro ejes: (1) Prevención Integral del Delito, (2) Control territorial estratégico, (3) Lucha contra el crimen organizado y el crimen transnacional, y (4) Fortalecimiento y modernización policial.
En esta ocasión, revisaremos el avance de uno de los ejes señalados, teniendo en consideración que la semana anterior observamos el “Plan celador” también mencionado en el mensaje de fiestas patrias orientado a reforzar el patrullaje movilizando a más de 6,500 policías por día mediante la compra de días francos y vacaciones. Sin embargo, a pesar de haberse anunciado en el mes de noviembre 2024, hasta el mes de julio de este año no se había implementado.
En este sentido, uno de los ejes del “Plan Perú Seguro” es la prevención integral del delito, siendo una de sus acciones la “Creación e implementación del Programa Nacional para la Prevención del Delito (PREVED)”, cuyo objetivo es articular y fortalecer los servicios públicos orientados a la prevención social, situacional y comunitaria del delito. Este programa se creará y regulará mediante Decreto Supremo, cuya formulación y publicación estaba programada entre enero y diciembre 2024, sin embargo, de la búsqueda realizada no hemos encontrado la emisión de dicha norma.
La Política Nacional Multisectorial de Seguridad Ciudadana al 2030, considera como unas de las causas directas de la inseguridad ciudadana la insuficiente labor en prevención del delito y la violencia y como causas indirectas, la desatención a factores de riesgo y débiles factores protectores, la limitada articulación de programas y servicios de prevención, y los bajos niveles de reinserción social; por lo que la falta de atención a las causas identificadas, posterga en el tiempo la solución integral al problema de la inseguridad ciudadana.
La prevención del delito requiere de una atención integral y multisectorial para disminuir los factores de riesgo que inciden en el comportamiento delictivo de adolescentes y jóvenes. Los factores de riesgo identificados son: a) factores familiares (Violencia familiar, falta de supervisión y control de los padres, malos ejemplos conductuales desde la familia), b) factores escolares o socioeducativos (violencia escolar y deserción escolar), c) factores sociales (Grupo de padres con conductas riesgosas y violentas, temprano consumo de drogas y alcohol), y d) factores socioeconómicos (desempleo, temprana iniciación al mundo laboral). Reiteramos que la atención prioritaria puede impedir el surgimiento de futuras carreras delincuenciales.
Se han formulado diagnósticos, planes y políticas para enfrentar el problema, pero los ciudadanos no aprecian los resultados y perciben como incapacidad del gobierno para enfrentar la situación para devolverles la paz y la tranquilidad a fin que puedan desarrollar sus actividades con total normalidad recuperando la confianza en sus autoridades; por lo que es necesario orientar prioritariamente el uso de los recursos a las actividades de seguridad ciudadana que beneficiará al conjunto de la población peruana.
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