Intento de golpe caviar contra Alva tras vacancia fallida
Los caviares -y sus socios comunistas de turno- pretenden censurar a la presidenta del Congreso, María del Carmen Alva (Acción Popular), por supuestamente pedirle a diputados españoles en Madrid que emitan un pronunciamiento señalando que Pedro Castillo era un mandatario ilegítimo. El cuento vino de dos congresistas zurdos (del PSOE y Unidas Podemos), quienes declararon su aversión hacia Alva por no ser de su tendencia hambreadora. Lo cierto, sin embargo, es que lo único que hizo en España la titular del Parlamento fue explicar la situación crítica del país, a causa de la inestabilidad provocada por la administración de Castillo. La acciopopulista no es para nada beligerante, sino todo lo contrario. ¿Encabezó alguna conferencia de prensa para rechazar el anuncio del cierre de minas por parte de la premier antiminera Mirtha Vásquez o para protestar por las reuniones clandestinas que ha venido sosteniendo Castillo en Breña con empresarios, ministros y congresistas? ¿Fue, acaso, drástica al condenar la burda injerencia del Gobierno en el proceso de ascenso de las Fuerzas Armadas? ¡De ninguna manera! María del Carmen Alva es recontra tibia y ha declarado varias veces que rechaza la vacancia presidencial y que ese es el sentir de la mayoría de la representación nacional.
Pese a ello, los caviares quieren su cabeza después de que la admisión de la moción de vacancia para Pedro Castillo por incapacidad moral permanente fuera negada, gracias a los votos cobardes de Acción Popular, Alianza para el Progreso y Podemos. Los zurdos de café se sienten fortalecidos y pretenden reemplazar a Alva por alguien (¿Flor Pablo?) que no represente oposición para Castillo y que esté presto a asumir la Presidencia en caso de que el profesor rural sea vacado y Dina Boluarte renunciara posteriormente, tal como ocurrió antes con Francisco Sagasti.
Ya el legislador comunista Guillermo Bermejo, procesado por afiliación terrorista, presentó una moción de censura contra María del Carmen Alva, la cual necesita 66 votos para prosperar. Sea cual sea el resultado, esto debe servir para que las bancadas de centro dejen de esgrimir ese estúpido argumento de la “gobernabilidad”, con el que han respaldado a gabinetes filoterroristas y dejado que el jefe de Estado siga haciendo desbarajuste y medio sin comparecer ante nadie. El costo de la tibieza es, pues, perder al único poder del Estado que le puede hacer frente a los comunistas enquistados en el poder. Urge que se consolide un bloque centroderechista, pero creo que es muy iluso pensar que ello ocurrirá: hay líderes mercantilistas que venderían su alma al diablo por preservar sus empresas. No obstante, si se alquilan a los comunistas, tarde o temprano perderán todo lo que consiguieron amasar. ¡Terminarán colgados con la soga que usaron para salvar a los rojos!
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