La atracción es un momento efímero

Es un estado existencial de agrado, de gustarte, de sentirte bien, en relación con la persona que percibes y te interesa conocerla, porque muchas veces te puede atraer una persona y no la llegas a conocer, simplemente te atrajo en un momento determinado, circunstancial, momentáneo. No hay que confundir con el amor a primera vista, no existe, se confunde con la atracción, sí hablamos de amor, es conocer a la persona en toda su integridad, cuerpo y alma y ese sentimiento no se produce de la noche a la mañana, hay que cultivarse, sentirse mutuamente, conocerse y admirar, porque el amor implica admiración, respeto, ubicarse en el lugar de la otra persona, el amor no es egoísta, sino magnánimo, libre, sin condiciones, fluye de lo más profundo del corazón y solo puede ser comprendido por aquellas personas que han amado y aman.

Muchas personas confunden la pasión con el amor, otra cosa es pasión con amor, empero solo pasión, importa por lo general una mezcla de instintos, atracción, vivir el momento y cuando termina ese éxtasis, la pasión cumplió su momento, ingresando al mundo de la razón; y en cambio, cuando la pareja está envuelta de pasión y sentimientos, la relación se hace más fuerte, se consolida, se afirma, se convierte en una sola, porque es recíproca, no existe duda sino fe y credibilidad. El gran problema es cuando se acaba el amor y solo existe la pasión o ya no existe amor ni pasión, la relación se vuelve rutinaria, distante, lo que fue importante ahora no lo es, las causas son muchas, algunas veces las parejas tienen perspectivas distintas y no coinciden en aspectos comunes, no hay que olvidar que el amor con pasión también madura, evoluciona, se hace más fuerte o débil, depende cómo se alimente en la pareja, no es estático, porque de ser así, la rutina los invade y el amor y la pasión se distrae con otras personas y para que no suceda hay que estar atento a lo que le agrada a la pareja y la hace sentir bien.

No hay que olvidar que todo no es color de rosa, existen las tentaciones, el mirar a otras personas, más aún cuando se comparan las parejas o existen otras atenciones de las que no son tu pareja, por eso la convivencia y el matrimonio no es el fin de la relación humana, sino el comienzo, que lo sepas preservar depende solo y exclusivamente de la pareja, no de terceras personas.

Toda relación de pareja tiene como origen la atracción, de lo contrario, no te agradaría conocerla; ahora bien, muchas relaciones han comenzado apasionadamente y con el transcurso del tiempo se han enamorado e inclusive se han unido y formado una familia feliz; y en otros casos, se han enamorado y después ha desencadenado la pasión, las dos formas son válidas en una relación de pareja, cuando se siente el amor y la pasión no existe las formas, por encima de todo está el amor, la necesidad de compartir juntos con la pareja y disfrutar momentos felices y difíciles, porque sabes que tienes a tu lado el soporte emocional que necesitas.

Hasta ahora existen familias tradicionales, que no permiten la convivencia antes del matrimonio; sin embargo, la realidad es otra, las hijas les dicen a los padres, me voy a pasar el fin de semana en la casa de una amiga e inclusive los llaman por teléfono y la realidad es que están conviviendo con su pareja por la prohibición de los padres, empero ellas no lo perciben así, por lo tanto, hay que decir la verdad, cueste lo que cueste, para encontrar el amor, pasión y atracción.

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