La tercera es la vencida
Durante casi 5 años me dediqué exclusivamente a la asesoría empresarial, principalmente en empresas familiares. Fue una excelente experiencia, de mucho aprendizaje, pero también me permitió conocer los factores que hacían que estas compañías no terminen de consolidarse como corporaciones; ¿el principal? Poner por encima sus necesidades personales que las de la propia compañía. En esta definición entran temas como, por ejemplo, el contar con personal NO calificado porque se le acomoda pagar poco o porque dicho personal es recomendado de alguien cercano (o inclusive un familiar); la necesidad de la compañía es una, pero al dueño le acomoda otra cosa; el no delegar tareas fundamentales porque “nadie lo va a hacer mejor que uno mismo”... este es otro de los continuos problemas de las empresas familiares, que es parte del círculo vicioso en el que se cae al rodearse de personas poco calificadas; el usar la caja de la compañía como caja chica personal, este caso es muy grave no sólo porque expone continuamente a la empresa a quedarse sin liquidez, sino que también hay un alto riesgo contable y tributario para el dueño del negocio (he visto casos donde incluyen hasta el pago del cable de su casa en las cuentas de la compañía). En fin, tantas cosas que terminan siendo trabas de progreso por decisiones de quien está a cargo, que así le afecten directamente, su comodidad está por encima.
Me es imposible no generar analogías entre lo que vivimos a nivel empresarial en el país y lo que sucede en nuestro gobierno. Si somos objetivos, más allá de cualquier inclinación política, ya es sumamente claro que el Presidente no es competente para el cargo que desempeña, no hablo sólo de incompetencia moral, hablo de no estar capacitado para liderar un país, no tiene estudios ni experiencia laboral que le permita tomar decisiones de alta dirección y menos para un país, el día de ayer se tuvo el segundo intento fallido de corregir la terrible decisión de haberlo puesto al frente. Señores, dejemos de pensar que la derecha se favorece, que la izquierda está “haciendo su agosto”, ya, por favor, cortemos este diálogo tan improductivo, hay hechos muy tangibles que nos deben permitir a todos los peruanos identificar que nuestro país está decreciendo a nivel de desarrollo.
Nunca seremos una “corporación” como país si seguimos poniendo intereses personales (los gobernantes) sobre lo que necesita el país como tal (no hablo de sólo el pueblo, hablo de todo el país), y eso se determina con el crecimiento macro y micro económico de la nación.
Presidente, ¡renuncie ya! La tercera vacancia que sea la definitiva. Pongamos el país en manos de alguien CAPACITADO al margen de su interés político, y un equipo técnico que nos lleve a ser la corporación que podemos ser.
Buena semana para todos.
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