La violencia: herramienta de traidores y totalitarios
Hay tres mujeres cegadas y equivocadas que no son capaces de dimensionar el inmenso daño que le hacen al país: la narcoterrorista camarada Vilma, vocera de los remanentes del militarizado Sendero Luminoso; Verónika Mendoza, que no duda en aliarse con el mismo demonio para tener protagonismo político; su apoyo a la marcha atropelladora del 19J se da a través de vínculos vergonzantes con el Fenatep, el ex reo terrorista Wilfredo Robles y otras organizaciones con sesgo subversivo y lenguaje inflamado, y, la cada día más incoherente y confusa Rosa María Palacios, que a través de las redes sociales ofrece sus servicios legales a aquellos que cuestionen el estado de emergencia de la Red Vial Nacional.
Saludo esta medida del Gobierno, hay que proteger a la ciudadanía utilizando mecanismos pacíficos y dentro del marco legal. Indistintamente del tono del discurso, las tres apoyan la protesta, justificando la barbarie y los muertos y heridos que parecerían ser su objetivo principal, para levantar el dedo acusador contra el Gobierno.
El Comunismo es intrínsecamente violento y a estas fanáticas incomprensibles habría que explicarles hasta la saciedad que se informen un poquito. No solo basta mirar la catástrofe económica de Cuba, Venezuela o Nicaragua. Limpiemos los cristales y observemos más allá, hacia finales de los ochenta cuando toda la economía china y casi toda la India eran públicas. El resultado era catastrófico. Sin embargo, en los años noventa que se iniciaron procesos privatizadores, que han abarcado a más de cien países, entre ellos el Perú, crecieron porque se liberalizó su economía y trajo mayor prosperidad.
Esta libertad económica tiene que venir acompañada de libertad política porque como bien dijo Fukuyama la legitimidad democrática es la única aceptable, no hay legitimidad alternativa al Estado democrático y liberal.
Se ha orquestado un altisonante discurso de apoyo a la protesta, pero en realidad es un albur quienes participarán en la mal llamada “Tercera toma de Lima”, muchos simplemente la financian. Demasiado dinero mal habido, incluso de Evo Morales y de aquellos que no demuestran ninguna empatía por sus pares en Lima. La asociación conformada por 350 centros comerciales de Arequipa ha hecho una importante colecta, pero no pararán sus actividades porque no pueden soportar un día de pérdidas. Un ejemplo emblemático del odio del Sur a Lima. Saben perfectamente que será una protesta feroz, que comerciantes limeños sufrirán el impacto, pero no se les mueve un músculo de remordimiento.
El gobierno del inefable Humala fue malo, recibió una economía en crecimiento y la mantuvo en piloto automático, Boluarte parece estar haciendo lo mismo, con la diferencia que recibió un país golpeado por la inflación, las protestas y la naturaleza. El programa “Con Punche Perú”, que únicamente apoya a las zonas afectadas por la conflictividad social y a las poblaciones vulnerable, es demasiado básico para una economía que no deja de caer y que se verá seriamente afectada por el fenómeno de El Niño: las inmensas tragedias personales, un agro moribundo por la sequía, y un sector pesquero doblemente perjudicado.
Estamos ad portas de una recesión: la gente compra y consume menos, el subempleo sigue ganando terreno con sueldos que no cubren la canasta básica, y los inversionistas prefieren llevar su dinero a plazas más seguras y menos reguladas. Es inaceptable que crear una empresa en el Perú tarde casi 7 veces más que en Chile y 4 veces más que Colombia o México. Nuestra competitividad es deplorable.
El MEF es poco creativo y está desactualizado. Es imperioso conformar un equipo de economistas de primera línea, que asuman el liderazgo económico, atreviéndose a tomar riesgos y medidas extraordinarias, empezando por reducir la pesada carga estatal. Si no se actúa pronto, el costo social será altísimo.
Mira más contenidos siguiéndonos en Facebook, Twitter, Instagram, TikTok y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.