Las estrategias de los dictadores
El sueño de todo dictador es quedarse en el poder toda su vida. Los dictadores que más pelean por ello, son los ambiciosos y codiciosos dictadores de países pobres que viven de la venta de sus materias primas. Como dictadores, tienen la potestad de “negociar” los precios que pagan empresas o naciones extranjeras, por la compra de las mismas. Muchos compradores, para ser favorecidos, pagan secretas “comisiones” que van a parar a los bolsillos de los dictadores y sus amigos. Esto es CORRUPCIÓN y es la verdadera razón por la que quieren quedarse en el poder; y no por creer en ideologías o para beneficiar a su pueblo. Los que compraron, lo hacen a precios bajos e irreales; para luego revenderlos a precios internacionales altísimos; percibiendo por ello enormes ganancias. Igualmente “negocian” en la ejecución de grandes obras públicas, compras, servicios, etc. mientras el pueblo, verdadero dueño de las riquezas, no recibe nada.
Entre otras, las estrategias de los dictadores, más usadas para quedarse en el poder; son las siguientes:
1.- Disolver, comprar, intimidar o cerrar Parlamentos e Instituciones de oposición; que no son afines a sus caprichos.
2.- Mantener, a cualquier costo, a las fuerzas armadas y policiales a su favor.
3.- Crear una red de información sofisticada (espionaje) de lo que hacen, hablan o escriben sus enemigos; y hasta ciertos amigos.
4.- Fomentar la emigración a otros países (“huida”) de gente opositora, mezclada con delincuentes, para eliminar las peligrosas protestas callejeras; porque saben que la protesta general de un pueblo unido es lo único que los puede derrocar. Ejemplo: CUBA (Del puerto de Mariel (“los marielitos”) fugaron a Miami miles de opositores, dejando a Castro en el poder hasta su muerte; como lo grafica la película Scarface. NICARAGUA: Agobiada por sangrientas protestas callejeras, permitió que opositores huyan en caravana a EE.UU., y se acabaron las protestas. VENEZUELA: La más grande “huida” de gente de oposición, que equivocadamente se ha refugiado en países pobres, con más problemas que virtudes, dejando al dictador haciendo de las suyas y burlándose del mundo.
Leonidas Antonio Prado Figueroa