Las inconsistencias en el rescate de PetroPerú
Hay tres claras inconsistencias entre las medidas adoptadas por el gobierno (Decreto de Urgencia 004-2024) y la actual situación de PetroPerú (PP).
En primer lugar hay que considerar que recientemente la calificadora internacional de riesgos Fitch rebajó la calificación de PP en soles y en moneda extranjera de largo plazo de PP, porque su endeudamiento es “insostenible”. Y Fitch no está sola en este diagnóstico. Ya anteriormente tanto Moody´s como Standard & Poor´s también señalaron el agudo sobreendeudamiento de la petrolera estatal. ¿Las medidas adoptadas solucionan, o al menos aminoran, el problema de endeudamiento? Definitivamente NO. Por lo que no creo que tengamos que esperar mucho para esperar un pronunciamiento al respecto de las calificadoras.
Además “la perspectiva negativa está alineada con la del soberano y refleja además las preocupaciones relacionadas con el débil perfil de liquidez de la compañía y sus necesidades de capital en el próximo año”(Gestión 01.02.2024). Lo que nos recuerda el párrafo anterior es que nuestra deuda soberana (la del Tesoro Público, la de Perú) también tiene perspectiva negativa. Ya en nuestro artículo del 29.01.2024 “Clara Advertencia” señalábamos la preocupación de Fitch por haber superado Perú el límite superior de nuestro déficit fiscal del 2023 (2.4%). Para este año la meta es 2.0% , lo cual todo parece indicar que también la incumpliremos, y si lo incumpliéramos dos años seguidos la tragedia que sería perder nuestro Grado de Inversión se acerca peligrosamente. Por lo que haría bien el ministro Arista en conversar anticipadamente con las tres principales calificadoras internacionales e informarles cuales son las medidas que adoptará este año para, cuando menos, acercarse a la meta fijada.
La segunda inconsistencia del gobierno, francamente inexplicable, es la persistencia en seguir nombrando para solucionar la crisis de PP a personajes directamente responsables de la profunda crisis por la que atraviesa la petrolera estatal. Cuando todos respirábamos aliviados por habernos librado del ahora exministro de Energía y Minas, Oscar Vera, quien a pesar de ser directamente responsable de la Nueva Refinería de Talara, por todos aceptado como la principal generadora de la profunda crisis por la que PP atraviesa, a pesar del evidente conflicto de intereses existente (al ser ministro del sector y empleado de PP con licencia mientras fuera ministro) permanecía al frente del MINEM, el gobierno se vuelve a tropezar con la misma piedra.
Es que el flamante presidente de la petrolera estatal, anteriormente fue el gerente de Finanzas de dicha empresa. Y estuvo a cargo del financiamiento (emisión de bonos en el mercado internacional) de la Nueva Refinería de Talara. Cuando todos sabemos que la estructura de financiamiento fue uno de los problemas principales del referido proyecto. ¿Es que el gobierno no pudo encontrar a un profesional debidamente calificado sin que hubiera estado “contaminado”? Y encima lo nombra Presidente!!!
La tercera inconsistencia es entre el diagnóstico del ministro del sector, Rómulo Mucho: “Petroperú es una empresa que está quebrada, para ser sinceros, está quebrada” y las medidas aprobadas. Si hay consenso entre las calificadoras que el principal problema actual es el muy elevado palanqueo financiero , la salida NO es otorgarle más deuda. Ya que no tengo duda que las garantías otorgadas por el Tesoro Público serán honradas cuando PP incumpla, y pasarán a incrementar los pasivos empresariales.
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