¡Los niños de Dios ya no están a la venta!

“¡Los niños de Dios ya no están a la venta!”, esta desgarradora expresión es la máxima en la que gira la película ‘Sound of Freedom’, producida por el mexicano Eduardo Verástegui. El filme aborda la trata de menores para su explotación sexual.

Durante su estadía en Perú, para promocionar la producción, Verástegui soltó terribles datos: millones de niños son violados en el mundo de 10 a 15 veces al día, y, una vez que dejan de ser “carne fresca” (ese es el lenguaje que usan los malditos pedófilos), venden sus órganos. De terror.

Lo que narra ‘Sound of Freedom’ no es ninguna fantasía, pues retrata la lucha de Tim Ballard, un valeroso exagente del Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos, en contra del tráfico de infantes en lugares a donde ni la Policía se atreve a entrar.

No ha sido nada fácil que esta película vea la luz, porque gigantes productoras progres, como Disney o Netflix, la rechazaron. Pero, como los planes de Dios ya están escritos, una pequeña productora de Utah, llamada ‘Ángeles’, se interesó por el proyecto y este, finalmente, fue estrenado con un éxito rotundo en las salas de cine de Estados Unidos el 4 de julio, superando a los blockbuster insípidos.

Lo más enternecedor es que el actor que hizo el papel de Jesús en ‘La pasión de Cristo’, Jim Caviezel, es quien interpreta a Ballard. Otra muestra de que la mano de Dios está presente en la obra de Eduardo Verástegui.

El maligno, por supuesto, se ha hecho presente a través de las lenguas viperinas de periodistas progresistas (incluso peruanos, como el veterano rojo Fernando Carvallo), que descalifican a Verástegui por sus opiniones políticas, cuando lo que debería ocurrir es que nos hermanemos para defender a los seres más vulnerables. Lo paradójico es que estos mismos zurdos de buenos modales no ven mal que sexualicen a los pequeños, a través de películas como ‘Cutíes’.

Estos caviares también celebran que la empresa del ratón pretenda homosexualizar a los menores con un gigantesco merchandising para respaldar el orgullo gay, que debería ser un asunto meramente de mayores de edad. Resulta que, para estos neocomunistas, los niños pueden autopercibirse de cualquier “género”, sin importar los genitales que tengan entre las piernas.

‘Sound of Freedom’ será estrenada en el país el 31 de agosto y es menester ir a verla, en rechazo a toda esta nefasta corriente woke y en defensa del derecho a la vida de los niños de Dios.

Otrosí: en una entrega anterior, afirmé que Fernando Tuesta era el autor de todas las nefastas reformas al sistema electoral, como esa que prohíbe la reelección parlamentaria. Tuesta me dice que él estaba en contra de esta iniciativa. ¿Quién es, entonces, el autor intelectual de este disparate? Todo indica que el argentino Maximiliano Aguiar, consejero a sueldo del lagarto Martín Vizcarra, sería quien le recomendó al moqueguano que inicie una guerra a muerte contra el impopular Congreso, el cual terminó cerrando inconstitucionalmente.

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