ÚLTIMA HORA
PUBLICIDAD

Matar o morir (II)

Imagen
Fecha Publicación: 27/11/2022 - 23:50
Escucha esta nota

Hace una semana explicábamos que el oficialismo y la oposición se encontraban en un curso de colisión, y que la disyuntiva era matar o morir. Y no nos equivocamos, ya que de los acontecimientos de la semana pasada se puede apreciar claramente que las partes en contienda están acelerando las medidas previas para poder estar en condiciones de ser los primeros en liquidar a su adversario. En lo que al oficialismo se refiere, el mayor revés que sufrió fue la decisión de la Corte Suprema de avalar las investigaciones preliminares que está efectuando la Fiscalía al presidente en ejercicio, decisión que calculadamente se publicó justo el día en que la misión de la OEA iniciaba sus actividades. Lo que desbarató el argumento principal del oficialismo, que había un golpe en marcha para sacarlo de Palacio. Ante estas derrotas Pedro Castillo y su entorno decidieron impulsar su máximo objetivo de corto plazo, la disolución del Congreso. Para tal efecto el ese entonces PCM Torres presentó una cuestión de confianza que la sustentó en el Congreso el jueves 17, en la que planteó que cualquier rechazo a su moción “será interpretado como un rehusamiento de lo que planteamos” (negación fáctica). Lo que fuera ratificado por dos voceros del Ejecutivo luego que la moción la rechazara la Mesa Directiva del Congreso. Inmediatamente (el viernes 25) se tomó juramento al nuevo gabinete presidido por Betssy Chávez. La que reúne todas las características para que el Congreso la rechace cuando presente su plan de gobierno. Es que si la aprobara quedaría muy mal, y si no la aprobara gastaría su bala de plata. Lógicamente se puede argumentar que el Congreso no ha gastado su primera bala de plata, pero ¿Cuándo le han importado a Pedro Castillo estas “pelotudeces democráticas”? Mientras tanto el mandatario sigue incrementando su fuerza de choque para que entre en acción en el momento oportuno. En lo que a la oposición se refiere, esta sigue explorando diversas alternativas, quedando claro que ahora la prioridad la tiene la denuncia constitucional presentada por la fiscal de la Nación. Pero según algunos, el fallo de la Suprema impediría el desarrollo de las investigaciones preparatorias (etapa que sigue a las preliminares). Asimismo, al momento de entregar este artículo el Congreso se prepara para debatir una demanda competencial y una medida cautelar ante el TC. Por el ejercicio de la cuestión de confianza en la Constitución y las competencias exclusivas y excluyentes del Legislativo.

El asunto es que la oposición ha intentado sacar a Castillo a través de dos mociones de vacancia, que fracasaron, se ha liquidado la acusación de traición a la patria y, como lo hemos apreciado hace pocos días, Castillo sigue muy activo tratando de fichar a nuevos congresistas que votarían en contra cuando sea necesario. Si bien es cierto que el número de votos para la suspensión del mandatario es bastante menor que en la vacancia, existen dudas que en el momento clave se logre el objetivo deseado. En la eventualidad que esas salidas tampoco funcionaran, habría que admitir que enfrentarse a un grupo que no respeta las leyes y que su máximo objetivo es cambiar la Constitución actual, a como dé lugar, con las armas de una democracia fallida como la que tenemos actualmente, es inútil. Por lo que habría que pensar en otro tipo de escenarios que impidan que el oficialismo se quede en el poder hasta el 28.07.2026, con todo lo que ello representaría.

Mira más contenidos siguiéndonos en FacebookTwitter Instagram, y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.