Miles de afectados por deudas a pesar de ley aprobada
La reciente ley aprobada en el Congreso para la reprogramación de deudas con las entidades del sistema financiero (ESF) hay que verla no solo del lado de los deudores, sino también de los acreedores.
Es obvio que los deudores necesitan ayuda para abordar la disminución de sueldos o el desempleo, producido durante la pandemia del Covid-19. Por el lado de los acreedores, deudas con atrasos de más de treinta días, no cobradas, puede implicarles aportes de capital que se les conoce con el nombre de provisiones, obligación difícil de cumplir para los accionistas
La norma aprobada no podrá salvar a todos los inmersos en el problema, creo que se ha hecho un esfuerzo, pero por haberse dejado el problema a la cola del programa Reactiva en sus dos versiones, ahora no ha habido mucho margen de acción y el programa de garantías lanzado del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) por 5,000 MMS/, para reprogramar deudas hasta en 3 años, va a resultar insuficiente.
Las estadísticas de la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS), a julio de este año, son útiles para emitir opinión. Siendo el total de deuda morosa de 3,000 MMS/, aparentemente podría ser cubierta por el programa. Sin embargo, aún falta recoger los incumplimientos de los meses venideros, sobre un universo de préstamos de 107 mil MMS/ a través de 4.27 millones de deudores, de los sectores: microempresa, crédito de consumo e hipotecario.
Con un incumplimiento del 3% del monto total, la necesidad de reprogramación ascendería a 6,000 MMS/ que supera al monto de garantías aprobado. No solo hay que ver el tema por el lado de cifras, sino también por los condicionamientos, que son dos: 1) estar clasificado en el extremo como crédito con problema potencial, que significa no haber tenido atrasos de más de 30 días y 2) haber pagado por lo menos 1/3 de la deuda. Es decir, en un crédito hipotecario a 20 años, haber pagado 80 cuotas mensuales y en un crédito vehicular a 5 años, haber cumplido con 20 mensualidades.
Hay que ir pensando cómo se manejará la situación con las personas que no alcancen a acogerse, que serán miles y las ESF que no puedan cumplir con provisiones. No estamos en situación de ver miles de embargos de bienes muebles y autos, así como desalojos.
