¡Ni un permiso más de viaje para Dina!

El Congreso no debe volver a autorizar que la presidenta de la República, Dina Boluarte, viaje al extranjero, después del tremendo papelón que protagonizó por la mentira de la “reunión bilateral” que iba a sostener con su homólogo estadounidense, Joe Biden, la cual nunca ocurrió: el “célebre” encuentro solo fue una foto de Biden agarrando de la mano a la mandataria peruana.

Presidencia había incluido, el último viernes, esta “reunión bilateral” en la agenda de Boluarte en Washington, pero el itinerario del presidente de Estados Unidos desmentía al Ejecutivo. Un día antes, la agenda de Joe Biden sí registró las reuniones que iba a tener con los dignatarios de República Dominicana (Luis Abinader) y Chile (Gabriel Boric) en la Casa Blanca. Ambas, por supuesto, sí se desarrollaron en total transparencia.

Una vez descubierta la farsa, Cancillería emitió un comunicado, en donde aseguró que, debido a falta de tiempo, Dina Boluarte no pudo concretar la reunión presuntamente pactada con Joe Biden. Incluso, el Ministerio de Relaciones Exteriores tuvo el descaro de afirmar que los gobernantes conversaron, al paso, sobre “asuntos que interesan a ambos países como la migración y la lucha contra el narcotráfico, entre otros”.

Si se trató de un encuentro al paso, ¿cómo Boluarte pudo hablar informalmente con Biden, si es que ella, hasta lo que se conoce, no maneja el inglés? ¿Se puede hablar, acaso, de temas tan específicos al paso? Para mentir y comer pescado, hay que tener mucho cuidado.

Ante tremendo escándalo, la cabeza de la canciller Ana Gervasi debe rodar y, reitero, el Parlamento no puede volver a otorgarle permiso alguno a Dina para que salga del territorio nacional y despache (?) de manera remota. En sus anteriores viajes, cabe recordar, la mandataria consiguió una “valiosísima” reunión con el alcalde de Stuttgart (Alemania) y una postal con el papa Francisco, que posó con un rostro adusto.

Por cierto, el último periplo de Dina Boluarte, en EE.UU., demostró que la señora vive otra realidad. A pesar de que el país se desangra por la criminalidad extranjera, principalmente venezolana, que amenaza –en videos mostrando armas de guerra– con asesinar a mototaxistas peruanos, la jefa de Estado aseguró que el país está en “paz y calma”.

Las inútiles declaratorias de emergencia por distritos no sirven para combatir la delincuencia, de modo que urge implementar un plan que realmente funcione, en donde los efectivos policiales puedan abatir a malhechores sin temor a acabar presos. Hasta ahora, el “plan Boluarte” es ¡¡¡no hacer nada y largarte!!!

Se supone que los viajes al extranjero de Boluarte tenían como objetivo que ella consiga inversiones, pero no hay mejor forma de hacer atractivo el país para los capitales extranjeros que solucionando el perentorio tema de la inseguridad ciudadana. Solo así podremos salir de la recesión económica en la que nos encontramos. Si no se hace nada, la permanencia de Dina Boluarte –y del Congreso– hasta 2026 se torna improbable.

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