¡No! al derroche publicitario

Los gobiernos eficaces y transparentes se caracterizan por no necesitar de campañas publicitarias para difundir sus políticas. El pueblo sencillamente las comprende porque están plasmadas en sus acciones. La palabrería hueca sólo sirve para desinformar al ciudadano. Pero este régimen gestionado por un personaje anodino, incapaz, se afana en continuar malversando sus recursos, amigo lector, derrochándolos en millonarias campañas publicitarias plenas de inexactitudes y medias verdades. Por cierto, además en propaganda personal para el presidente y sus amiguetes. Todas estas “campañas” apuntan a ocultarle la verdad al país y a evitar que, una vez fuera del poder, Vizcarra y sus compinches sean judicializados. Aunque la propaganda de este régimen ha tenido siempre el efecto contrario al perseguido, porque la burocracia a cargo de este giro es casi tan incompetente que Vizcarra y sus ministrejos. Además, porque los medios de comunicación -a los cuales el gobierno subsidia con mil millones de soles cada año dizque para “mantener bien informada a la ciudadanía”- ya no tienen llegada al pueblo. La elite lectora/televisiva sencillamente ignora los mensajes pueriles que le hace llegar el gobierno. Lo más grave es que el dispendio en avisaje de este gobierno –repetimos mil millones de soles anal año- beneficia a firmas periodísticas venales que negocian su línea informativa y editorial; en tanto merma recursos a sectores clave como son Salud, Educación y Seguridad Ciudadana. Esto ocurre porque si el gobierno recorta el subsidio a la prensa corrompida, ésta automáticamente lo amenaza con declararse opositora a Vizcarra. Lo que demuestra el chantaje bajo el cual subsiste este régimen. Exactamente la misma lacra que existía durante el fujimontesinismo, aunque ahora legalizada mediante facturas emitidas por los medios bajo la sello de “avisaje oficial”.
Pese a todas las evidencias de abuso contra el bolsillo popular al que apela Vizcarra para mantenerse en el poder, el inefable premier Martos justifica así otra gigantesca malversación de fondos –repetimos, dinero que debería destinarse a Salud, Educación y Seguridad Ciudadana- que prepara el vizcarrismo para aquietar la angustia de los medios al borde de la quiebra que respaldan a Vizcarra, y desinformar al pueblo con otro cúmulo de mentiras mostradas como acciones exitosas de un régimen fracasado: “Hay una dirección de comunicación que encabeza la PCM y un grupo de inteligencia sanitaria que ve cómo se desarrolla la pandemia y verifica el comportamiento de la población ante medidas que va tomando el Gobierno. En base en ello se está haciendo una campaña transversal. Van a ser mucho más intensas (las campañas y por tanto la malversación). Los presupuestos que existían antes ya eran insuficientes. Estamos pidiendo mayor presupuesto.”
Asistiremos desde la fecha a un festival publicitario de dimensión sideral, en medio de una crisis macro y microeconómica sin precedentes. Semejante despilfarro no ayudará al pueblo, sino a determinados medios periodísticos semiquebrados.
Apostilla. Presidente Vizcarra y premier Martos, su spot “Si vas a visitar a tus abuelos, pregúntales dónde quieren que pongas sus cenizas” revela su miserable entraña y su vulgarísimo talante.