¡No bajen la guardia, congresistas!

Sin siquiera evaluar la trayectoria política de quienes integran este remozado gabinete ministerial –olvidando aquello de “caras vemos; corazones no sabemos”– Podemos, el partido de Luna Gálvez, congresista/propietario de un inmenso complejo universitario (cuya defensa del bolsillo es su exclusiva razón de estar en la política), anunció al día siguiente de juramentados los ministros que “les otorgará su confianza”.

Esta ralea de politiqueros –que defienden su patrimonio antes que el interés del país en su conjunto– desmerecen el respeto de la ciudadanía.

No es indispensable hurgar en los archivos periodísticos (que revelan la auténtica talla de quienes merodean tras la política criolla) para saber que, ideológicamente hablando, el gabinete Vásquez está tanto o tal vez más compenetrado por el pensamiento gonzalo –y por la doctrina marxista– que ese mamarracho de consejo ministerial que dirigiera el “puka” Bellido.

Rememoremos que la ahora primera ministra, Mirtha Vásquez, votó contra la vacancia de Vizcarra (tipejo que, caprichosamente, por no interesarle atender la pandemia es principal culpable del fallecimiento de 200 mil peruanos). Coincidentemente, Vásquez acabó instalada como presidenta del Congreso representando al partido del marxista cura Arana.

Ella integró la ONG antiminera Grufides, y saltó a la palestra denunciando a Yanacocha siendo abogada de campesinos afectados. Vásquez difiere de “puka” por su civilizado talante y buenas maneras. Aunque el objetivo de ambos es idéntico: instalar contra viento y marea la asamblea constituyente. ¡Cuanto más rápido mejor! Ahí amable lector estriba todo el peligro de caer en una dictadura comunista calcada en forma y fondo de la estructura totalitaria cubana y/o venezolana.

Veamos otros ejemplos de similitudes entre los integrantes del gabinete “puka” y sus pares en el presidido por Vásquez. El ministro de Educación, Gallardo, es directivo de la federación magisterial ligada a movadef, sindicato que lideró el presidente Castillo y registró indebidamente el pro senderista Maraví. ¡Esto, sin lugar a dudas, consolida a sendero en la Educación peruana! ¿Le parece correcto, amable lector? En cuanto al nuevo ministro del Interior, Roberto Barranzuela, es un ex mayor PNP con 837 días de castigo en su cortísima estadía como Policía.

Además, Barranzuela es abogado de Vladimir Cerron, “puka” Bellido, Guillermo Bermejo, Roger Nájar, todos investigados por la PNP como socios de la banda criminal “Dinámicos del Centro”. ¡A estas joyas asesora el ministro que maneja la división policial que les investiga! ¿Es lícito, amable lector? Finalmente, el ministro de Educación es acciopopulista, partido que pudiese dirimir la votación de confianza congresal al gabinete Vásquez. ¿Es ético en esta tesitura, amable lector?

Permanezcamos con el cinturón abrochado, señores. El vehículo mantiene a Castillo, el mismo piloto; y la tripulación es igual de extremista, aunque con buenos modales. ¡No bajemos la guardia! Para esto es indispensable que el Parlamento comprenda que la coyuntura sigue siendo tan grave como con “puka” de premier. Castillo va rumbo al cambio de estructuras calcadas de castrismo-leninismo a través de una constituyente. ¡Darle la confianza a este gabinete sellaría la sentencia de muerte del Parlamento, y la consolidación del comunismo como sistema político nacional!

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