No derogar RM 392 es convocatoria a sublevarse a Chumbivilcas
Han transcurrido algo más de 5 años desde que la minera «Las Bambas S.A.» se apoderó de la carretera (trocha) privada de las comunidades de Cotabambas-Chumbivilcas y Espinar. Siendo privada, nunca fue ni nacional ni departamental ni regional ni provincial ni municipal.
El apoderamiento de la minera consistió en meter a sus 400 vehículos (compactados) transportando concentrados de cobre a Matarani, que debía hacerlo por su mineroducto subterráneo, único medio de transporte establecido en su proyecto-EIA y que no lo ha hecho. Las comunidades repelieron y repelen esta usurpación. Han impedido el paso por más de 500 días (casi un tercio de cada año).
La usurpación fue resistida sangrientamente y con represión judicial y complicidad del gobierno hasta mayo de 2018.
En esa fecha por imposición de la transnacional, en su 8vo considerando de la RM 392-MTC, a la trocha privada por primera vez se la denominó «CORREDOR VIAL APURÍMAC CUSCO». Hay entonces, una falsificación de la realidad en el Convenio.
Finalmente, en las denominadas «Actas de las Bambas» de Dic/30/2021, CONVENIO entre el Estado y los gobiernos departamentales de Apurímac y Cusco, la usurpación de carretera se prolonga hasta Matarani denominándose «Corredor vial de Apurímac, Cusco y Arequipa».
En su artículo 1ro, el gobierno acepta considerar en el presupuesto de la República el saneamiento físico y legal de este nuevo corredor vial + su asfaltado y mantenimiento. Su importe calculado es de 9.2 mil millones de dólares.
En la reunión realizada ayer en Ccapacmarca, la premier sostuvo imposible la derogatoria de la RM 392, aduciéndo que es resultado de un Convenio, que está fuera de su competencia.
Significa que es obligación internacional y que en este momento «Las Bambas S.A.» ya podría empezar procesos en tribunales extranjeros para el cumplimiento inmediato del saneamiento y demandar indemnización al Perú por daños y perjuicios.
La exigencia de la derogación es vital; pues, esa RM es el comienzo de la cadena delincuencial de «Las Bambas S.A.» cuyo logro está a la vista: no ha invertido en su mineroducto y, por el contrario, estaría consiguiendo que el Perú le haga su Corredor Minero hasta Matarani.
El Estado no es parte. Es autoridad.
La derogatoria de la referida RM es de máxima trascendencia patriótica. Encarcelar a sus ejecutivos por la usurpación de propiedad privada de las comunidades y expulsar a la transnacional delincuente.
Chumbivilcanos adelante, el Perú profundo los seguirá.
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