NO OLVIDAR: Castillo llegó a Palacio por los caviares

En una entrega anterior, me referí de forma somera a la aparición del presidente por accidente Francisco Sagasti con la panacea para salir de la crisis política. Esta vez, ahondaré más sobre la irrupción de quien le pidió un autógrafo al emerretista Néstor Cerpa Cartillini. Sagasti recomendó, en entrevista con ‘Cuarto Poder’, iniciar una recolección de unas 75,600 firmas para presentar un proyecto de reforma constitucional para recortar el periodo presidencial y congresal. En simple, el caviar morado propone que se vayan todos, a fin de, por supuesto, volver a Palacio de Gobierno. La proposición del exmandatario fue secundada, de inmediato, por el actor golpista Salvador del Solar, y aplaudida luego en portada del diario rojo La República.

Ahora resulta que Sagasti, quien le bajó la valla al puesto de secretario general del Despacho Presidencial para que asuma Bruno Pacheco, tiene el remedio para librarnos del inimputable que hoy está en el poder. ¿Acaso no fueron los caviares los que coronaron a Pedro Castillo porque supuestamente nada era peor que Keiko Fujimori?

Dijeron, pues, que Fujimori lideraba una organización criminal (por cierto, los aportes irregulares a un partido no es lavado de activos), que era una narcotraficante (tremendo cuento ese de Jesús Vásquez y la DEA) y que el corrupto Vladimiro Montesinos estaba detrás de su campaña (¡ni se llevaron nunca bien!).

A la par, omitieron que Castillo venía de la facción senderista del magisterio y que, dada su beligerancia en la huelga de maestros que lideró, los escolares casi pierden el año. Tampoco les interesó que su ignorancia quedara puesta al descubierto en la entrevista que le realizó el periodista Diego Acuña. Un tipo así no calificaba ni para ser director de un colegio rural, pero la democracia boba hizo que el sindicalista triunfara por un puñado de votos. Este mismo sistema también le abrió las puertas del Parlamento a la barrendera ‘Chabelita’. ¿No tendríamos que ser más exigentes en los requisitos para quienes pretenden ostentar un cargo público, cuyo sueldo sale de nuestros bolsillos a través de los impuestos que pagamos?

A los caviares menos les interesó que detrás de Pedro Castillo esté el comunista corrupto Vladimir Cerrón, sindicado como el líder de la banda criminal ‘Los Dinámicos del Centro’.

El tiempo, finalmente, nos dio la razón a quienes nos opusimos con sangre, sudor y lágrimas a la candidatura del lápiz. Hoy, a Castillo se le imputa encabezar una mafia enquistada en el MTC desde donde direccionaría licitaciones para favorecer a sus amigotes. Una de estos (Karelim López) ha comenzado a cantar. Y pronto harán lo mismo otros en los siguientes días, como el empresario Zamir Villaverde tal vez. La caída del profesor está cada vez más cerca, y, cuando ello ocurra, hay que recordarles a los caviares que siempre fueron cómplices de la porquería que brota todos los días de este Gobierno.

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