Nueva visión inmobiliaria
La semana pasada fui testigo de un encuentro sin precedentes entre los tres gremios inmobiliarios del país, liderados por la Asociación de Empresas Inmobiliarias del Perú (ASEI), y los alcaldes distritales de la Mancomunidad Lima Norte. El lugar de reunión: el distrito de Independencia.
El objetivo fue instalar una Mesa de Trabajo que promueva acceso a viviendas formales para vecinos de esos distritos, planificar su desarrollo urbano y atraer más inversiones, a contracorriente de otros municipios limeños como Surco, Magdalena, San Isidro y Miraflores, que se resisten a recibir más proyectos MiVivienda.
Lo más interesante de esta jornada matutina fue ver al viceministro de Vivienda y Urbanismo respaldando este feliz encuentro con los alcaldes de Independencia, Comas, Rímac, San Juan de Lurigancho, Puente Piedra y los presidentes de ADI, ASEI y CAPECO.
El resultado fue la instalación de una Mesa de Trabajo que se reunirá periódicamente y propondrá líneas de trabajo en varios frentes. La simplificación administrativa será uno de ellos, sin duda. La Mancomunidad Lima Norte trabaja ya un solo trámite administrativo para licencias que unifique a todos los distritos. La reducción de tiempos de espera en autorizar la construcción de un inmueble será otro. “Comas ya entrega licencias en 20 minutos para que los empresarios se sientan tranquilos y seguros”, aseguró su alcalde.
El presidente de ASEI recordó las alarmantes cifras de déficit habitacional en el país (más de 1 millón 800 mil familias sin casa propia), así como la necesidad de generar más de 200 mil viviendas por año si queremos reducir esta brecha en los próximos 10 años. El modelo de generación de vivienda funciona, pero requiere de ajustes que lo potencien mucho más.
Un factor clave es la identificación de terrenos para el desarrollo de proyectos inmobiliarios que generen viviendas, centros comerciales, centros de salud, centros educativos, pistas, veredas y áreas verdes. Otro factor clave es destinar mayor presupuesto público para subsidiar la demanda, de manera que las familias elijan libremente donde vivir con apoyo del Estado. Un tercer factor clave es la promoción de estas inversiones y proyectos, así como su socialización con la Municipalidad de Lima para que se concreten y se hagan realidad.
Esta Mesa de Trabajo debiera replicarse en Lima Sur, Lima Este y en todas las regiones del país. Solo un empresariado que entienda la transformación de nuestras ciudades como motor del desarrollo, descubrirá el círculo virtuoso de hacer negocios más rentables, con mayor generación de empleo, con mayor construcción formal, con más familias que se convierten en nuevos propietarios, y con municipios que reciben mayores ingresos por impuestos ante la inversión realizada. ¡Vamos por más!
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