¿Nuevo ciclo o coartada para el biodiésel peruano?
Con amplio despliegue mediático, Petroperú comunica la celebración de un contrato de suministro de biodiésel producido en el Perú, para el período febrero-junio 2020. Han sido invitados para la foto, el fabricante y los palmicultores agrupados, y por supuesto la prensa, para que propale que soplan nuevos vientos en la petrolera estatal. Vale la pena unas reflexiones sobre el significado de este acto.
Desde esta columna y desde este diario, he venido reclamando el cumplimiento de la Ley de Promoción del Mercado de Biocombustibles (Ley 28054), desde su promulgación hace 16 años, cuyos alcances van más allá de la simple compra de biocombustibles por las refinadoras locales. Está prevista para el desarrollo agropecuario, agroindustrial, creación de empleo, mitigación medioambiental y mercado alternativo en la lucha contra las drogas.
Los objetivos de la ley han sido incumplidos, con la activa participación de Petroperú, que en una visión desarticulada de las políticas del Estado, estuvo predispuesta al facilismo de la importación, llegando a extremos que generan suspicacias, como tener un solo proveedor durante más de un año, con cuantías nada despreciables del orden de los 164 millones de dólares anuales.
Ahora se ha anunciado por todo lo alto, el suministro local de 70 mil barriles (MB) de biodiésel de producción local para un período de cinco meses. Si se compara la cifra con las necesidades reales, estamos hablando que la celebrada adquisición representa tan solo el 10% de lo requerido en el período. Ya he demostrado hasta la saciedad que hay capacidad local de producción de aceite de palma aceitera, y de producción de biodiésel a partir de dicho aceite, para abastecer el 100% del mercado local.
La insoslayable interrogante es: ¿estamos iniciando un ciclo virtuoso para los palmicultores y productores del biocombustible o es una coartada para seguir importando el 90% de la demanda? No he pedido, ni pediré favoritismo para el suministro local, siempre he abogado por la competencia, exigiendo transparencia que no se cubre con un bonito video como el mostrado en el portal de Petroperú, sino con detalles más específicos, que ya desarrollaré, aprovechando el acuerdo entre la empresa y el Ministerio Público.
