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Nuevo complot golpista de Vizcarra

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Fecha Publicación: 30/11/2019 - 22:00
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Escribíamos ayer: “Arrancó la segunda fase del vizcarrismo. La primera estuvo abocada a dar un golpe de Estado que desembarcó en el cierre del Congreso; la toma absoluta del poder por el presidente accidental Vizcarra; la compra de la prensa; y la campaña de exterminio de la clase política no izquierdista (…)” Y la segunda empezó antier con “un putch vizcarrista para hundir a la empresa privada y deshonrar al empresariado”. Cesados los parlamentarios, “los empresarios pasan a ser los nuevos villanos del Perú (…).” Este será el argumento que marcará el accionar del siguiente episodio golpista de Vizcarra.

Pero EXPRESO denunció ayer entresijos de un complot del jefe de Estado accidental Vizcarra contra la empresa privada. Se trata del contubernio entre éste y la Fiscal de la Nación Zoraida Ávalos, para sorprender al empresariado en la Conferencia anual que convoca un desprestigiado Cade. Vizcarra había reconfirmado que asistiría el viernes al Cade. Pero súbitamente, apareció el jueves. Ocurre que la víspera se había reunido en palacio tres horas -en solitario. con la Fiscal Ávalos. Según la vicepresidente Mercedes Araoz, “estas reuniones nunca se realizan a solas.”

Obviamente Vizcarra supo entonces la intención del fiscal Domingo Pérez de intervenir Confiep el viernes. Aquello lo obligaba a adelantarse a los hechos. Porque su táctica consistía en lograr el aplauso empresarial a su discurso. Y no lo conseguiría asistiendo a Cade el día que Pérez intervenía Confiep para confrontar por segunda o tercera vez su documentación contable. El efecto procurado por Vizcarra –en complicidad con la Fiscalía- era doble. De una parte, humillar a la empresa privada peruana haciendo que sus personeros aparezcan como felpudos aplaudiendo a rabiar la presencia de un jefe de Estado golpista; y, en simultáneo, comprobar como estos se autoflagelaban por un delito inexistente.

Pero además, Vizcarra necesitaba una cortina de humo para tapar el escándalo de su amigote y ex premier Villanueva, imputado por recibir US$320,000 de Odebretch mientras fue gobernador de San Martín. ¡El escándalo de intervenir Confiep le caería como pedrada en ojo de tuerto! Mejor si ocurriera precisamente después de que una impresentable presidente de Confiep se vanagloriara de empapelar, en forma corporativa, a los empresarios de Credicorp (el conglomerado empresarial más grande del país) imputándolos en forma especulativa –y por demás injustificada- de corruptos, exigiéndoles que renuncien a sus cargos.

En suma, la nueva treta golpista de Vizcarra se cumplió con creces. En primer término el empresariado –siempre melindroso- lo aplaudiría con frenesí, no obstante que lo amenazara crípticamente con una reforma constitucional, sin precisarles el capítulo económico; y asimismo 43% de los asistentes a Cade aprobarían su gestión como mandatario, pese a esta resbalosa situación de la economía nacional. ¡Y para concluir, 66% de los concurrentes al Cade aplaudirían la gestión de su operador estrella, el fiscal Pérez.

En palabras del congresista Juan Sheput “todo fue un show para poner a los capitanes de empresa en contra de la población y así lograr que el Presidente suba unos puntos de popularidad a costa de ellos.”