País sin garantías: asesinan a 6 peruanos todos los días

En el año 2017, nuestro hermoso país enfrentaba los primeros veinte años del siglo XXI con un porcentaje de pobreza menor al 19 %. Una economía que permitió hacer del turismo el boleto a la libertad económica de cientos de miles de peruanos. ¿La inseguridad? Ese siempre
ha sido nuestro “talón de Aquiles”. Aunque diversas teorías criminológicas, como las de Robert Merton y Richard
Cloward, relacionan la disminución de la delincuencia, la tasa de victimización y violencia con el crecimiento y desarrollo económico y la disminución del desempleo, la realidad en América Latina nos muestra todo lo contrario.
¿Cuál es el problema? ¿El modelo altamente competitivo que resulta ser el libre mercado, una economía abierta donde las personas hacen sus propios intercambios? ¿O la distribución y la generación de micromercados que ese libre mercado debe crear? La disminución de la tasa de
victimización en el Perú se ha reducido de forma sostenida desde el 2011, en la que vivíamos con una tasa de victimización de 40 %; en el 2017, una tasa de 26.4 %; y en el 2021 cerramos con 18 % de inseguridad. Tampoco es novedad que, entre los años 2012 y 2019, el Perú lograra posicionarse como una economía “estable”. Esto es un tanto mediocre, porque la llamada “estabilidad” no significa desarrollo sostenido, así como el estado de confort significa estancamiento. Eso es lo que ha ocurrido con el país.
El Estado peruano y los peruanos hicimos exactamente lo que las mentes mediocres hacen cuando se encuentran en un estado de confort y ligera bonanza: conformarse. No por nada somos un país con casi 30 % de pobres. Hemos pasado de tener algo más de 600 homicidios en el año 2017 a más de 2000 homicidios en el 2024. Estamos hablando de 230 % más en solo siete años.
Queridos compatriotas: la delincuencia común y el crimen organizado son las principales causas de homicidios. Estos factores están amenazando la vida, el crecimiento y el desarrollo de millones de peruanos. ¿Por qué me concentro en nuestros compatriotas? Porque el Perú es para los peruanos antes que nadie. Si el país no ofrece garantías para sus hijos, no las ofrecerá para nadie que llegue desde
sus fronteras. No concibo la idea de que un padre o madre piense en dar a otros lo que no puede dar a sus propios hijos. Cerramos el sangriento y violento año 2024 con más de 2100 peruanos asesinados. El 80 % de estos asesinatos se realizó con arma de fuego. Eso significa que, cada año, los homicidios son más violentos. ¿De dónde ha llegado esta violencia? La hemos importado del país más violento de
América Latina: Venezuela. Sicarios de importación, pandilleros de importación, malandros de importación, personas cero productivas de importación. No vamos a salir de este hundimiento de nuestra sociedad si no destruimos de forma implacable a la delincuencia de importación.