Pedro Castillo: No te tenemos miedo
Ni miedo ni pena, solo siento rabia e impotencia, en especial por ese poco más de un millón de votos blancos y nulos que han sido protagonistas de la lavada de manos más dañina de la historia del Perú. Absolutamente intencionales, en una costosísima demostración de poder, sabiendo que no hay vuelta atrás. Hoy no sentirán ningún remordimiento por abrirle la puerta al Comunismo, pero esa penosa decisión tarde o temprano les pasará la factura.
Ningún peruano tiene más derechos que otro como pareciera haberles hecho creer Castillo a sus votantes. Las elecciones se ganan en las urnas, por ello, inaceptable que Dina Boluarte inste al desorden, sosteniendo que la única forma en que podría triunfar Fujimori es a través del fraude. Esto dicho con un nivel de soberbia que solo profundiza las heridas de nuestro fratricida país. De engaños bien conocen ellos, no solo en los procesos electorales con sus personeros hostiles y descubiertos con cientos de cédulas de votación ya marcadas sino con muchísimas impugnaciones selectivas de PL, en lugares con amplio caudal electoral de FP, cumpliendo con el mandato de su líder de que las elecciones se ganan en mesa. Pues tome el tiempo que tome, cada una de las muchísimas actas cuestionadas tendrán que ser sometidas, meticulosamente, al escrutinio de las autoridades electorales, a pesar de la desconfianza que generan la parcialidad y los juicios sesgados de Salas.
Los miembros de mesa no rinden cuentas de sus actos a pesar del rol tan delicado que les toca cumplir. Debería imponerse una sanción a aquellos que cometen errores imperdonables como no firmar las cédulas de votación o las actas de sufragio, cuyo cumplimiento solo requeriría de mayor cuidado. Las consecuencias son muy onerosas, sin ningún tipo de responsabilidad para los culpables; fácilmente podrían ser descuidos intencionales. Bien dijo Piero Corvetto, jefe de la ONPE, que con la voluntad popular no se juega. ¿Me pregunto si un error garrafal, que parece casi hecho a propósito, no es también un desacato al deseo de los votantes?
Sin embargo, no nos daremos por vencidos jamás. Si Cerrón o Castillo piensan que agacharemos la cabeza y perderemos nuestra libertad, mansamente, se equivocan. No confío mucho en las organizaciones internacionales, generalmente tibias y medrosas pero se peleará con la ley en la mano y con todos aquellos aliados democráticos que quieran sumarse, hasta el final. Leopoldo López, quien nos visitó recientemente, es un ejemplo de lucha sin tregua contra el totalitarismo. Espero que este sólido frente de defensa por la libertad que se ha movilizado en esta segunda vuelta, se mantenga firme, como un solo puño. Que los empresarios y aquellos que sabemos cuidan sus intereses particulares antes que el país, no se conviertan en disidentes, en traidores y se acomoden con el régimen como ocurrió en la época de Juan Velasco y los recordados “Altecos”, donde el soplonaje respecto de los pares era muy bien recompensado.
Estos resultados son un inmenso llamado de atención. Promesas como recibir el 40% del canon, el bono Oxígeno o duplicar Pensión 65 ya no calan en la población. Pareciera que sólo creen en la falacia de “No más pobres en un país rico” y la redistribución de la riqueza a la mala. ¡Muy preocupante!
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