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Pesadilla constituyente

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Fecha Publicación: 06/07/2021 - 22:30
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No lo han proclamado Presidente de la República pero está visto que al profesor Castillo las formas de la Democracia “burguesa” le importan un comino. Afirma que en el supuesto Mensaje a la Nación que dirigirá desde el Congreso solicitará “ que (se) agende inmediatamente la instalación de la Asamblea Constituyente para redactar la primera Constitución del Pueblo”. Ni Leguía tuvo tales ínfulas. Para remate el camarada Bermejo, congresista electo de su partido marxista, leninista, mariateguista, etc., y procesado por afiliación al terrorismo para vergüenza del próximo Parlamento Nacional, ha anunciado que recolectarán las firmas necesarias para el Referéndum aprobatorio de la nueva Constitución y que ni siquiera requerirá la bendición del Poder Legislativo porque así ocurrió –según él- en el caso del Fonavi. Ignorancia supina del tal Bermejo ya que el polémico asunto del Fonavi nació originalmente por una iniciativa ciudadana cuyo proyecto de ley fue rechazado por el Congreso y luego terminó sancionado vía consulta popular.
Si Castillo y su gente llegan a Palacio de Gobierno estamos más que avisados que les importará un bledo el Estado Constitucional de Derecho y que su pretensión máxima será la Asamblea Constituyente a trancas y barrancas. Qué imperio de la ley y ocho cuartos si es el “pueblo” quien lo reclama y al diablo con la seguridad jurídica y la confianza en la institucionalidad republicana y democrática del Perú.
Guardamos la esperanza que todavía podamos despertar de esta pesadilla antes del 28 de julio próximo. Sin embargo, frente a este aberrante ukase constituyente acaba de surgir una iniciativa contraria que propugna convocar a un Referéndum en defensa de la Carta Magna en vigor. La actual Carta no está escrita en piedra y, a través de su mecanismo de reforma, puede perfeccionarse democráticamente sin desbarrancar el país. Este es el camino del cambio y no el nefasto canto de sirena de Castillo-Cerrón y adláteres. ¡A firmar ya el planillón de adherentes! ¡AMÉN!

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