Poncio Pilato Legislativo

Luego de cogobernar y blindar a Dina Boluarte, los congresistas de Alianza para el Progreso y de Fuerza Popular inclinaron la balanza para que sea vacada.
Esta miserable estrategia política tuvo como fin lavarse las manos cual Poncio Pilato, para buscar una curul como diputados o senadores. Para esta clase de gente, la gobernabilidad, la constitucionalidad y el Bien Común no les interesa. El único fin es agarrarse como garrapatas de la mamadera del Estado por un período más.
Personal y particularmente, es una vergüenza que José Enrique Jeri Oré haya asumido la Presidencia de la República entre gallos y medianoche por sucesión constitucional, tras la declaratoria de la vacancia de Boluarte por el Congreso, convirtiéndose en el octavo presidente en menos de una década.
Jeri fue presidente del Congreso de la República para el período anual de sesiones 2025-2026, cargo que ejerció por 75 días. No hay que olvidar que accedió a una curul como accesitario de Martín Vizcarra; es militante de Somos Perú y fue delegado e integró la coalición Alianza para el Progreso del Perú de César Acuña, debido a que el partido al que pertenecía, Somos Perú, era miembro de dicha coalición.
En las elecciones parlamentarias de 2021, Jeri postuló por Somos Perú, siendo el número 3 de la lista de candidatos. Pese a que obtuvo apenas 11,654 votos, logró salir elegido como congresista. Esto se debió a la inhabilitación de Martín Vizcarra.
El programa de Milagros Leiva denunció a Jeri por presunto enriquecimiento ilícito debido al aumento sideral de su patrimonio personal, dado que en el 2021 Jeri había declarado la posesión de dos vehículos por un monto de S/ 97 mil soles, y para 2024 habría adquirido propiedades por un valor de más de un millón de soles.
El programa Panorama lo denunció por un presunto pago de soborno a Jeri de S/ 150,000 sucedido en noviembre de 2023, cuando lideraba la Comisión de Presupuesto del Congreso de la República, por parte de la empresaria Blanca Ríos. Ella indica que el pago de la coima era con el fin de ser beneficiada en el proyecto de una obra de irrigación en Cajamarca. Además, involucró a la congresista Ana Zegarra, vocera de Somos Perú, y al asesor Nahum Hidalgo, vinculado a la misma bancada. Jeri, posteriormente, rechazó la acusación, argumentando que no tenía vínculos con dicha persona y anunció que se iba a someter a las investigaciones.
No hay que olvidar lo preceptuado en el artículo 110 de nuestra Constitución Política: “El presidente de la República es el Jefe del Estado y personifica a la Nación”, y lo que afirma José Antonio Pérez-Rioja, escritor español, autor del Diccionario de Símbolos y Mitos: “Pilato se ha convertido en un símbolo tradicional de la vileza y de la sumisión a los bajos intereses de la política”, frase que cae “como anillo al dedo” para nuestra paupérrima política, salvo muy raras excepciones.
Su permanencia dependerá de su capacidad para tomar distancia de los intereses partidarios, construir un gabinete técnico e independiente, y ofrecer resultados concretos en materia de seguridad y gobernabilidad.

Mira más contenidos en Facebook, X, Instagram, LinkedIn, YouTube, TikTok y en nuestros canales de difusión de WhatsApp y de Telegram para recibir las noticias del momento.