Protagonistas de la salud
(México).– Invitados por la Federación Latinoamericana de la Industria Farmacéutica (FIFARMA) al primer Annual Summit 2025 en Ciudad de México, tuvimos el privilegio de presenciar un hito histórico en los procesos evolutivos de nuestros sistemas de salud.
Este primer evento tuvo la particularidad de tener como invitados, además del habitual representante de la industria farmacéutica de avanzada y sus gremios empresariales, a un importante grupo de asociaciones de pacientes y líderes de opinión de los países participantes.
Lo más interesante es que durante estos dos días de intenso diálogo y debate, donde vimos cifras y data reciente en investigaciones clínicas, inversión en salud, acceso a innovación y sistemas regulatorios, a modo de ranking, acompañadas de casos de éxito y buenas prácticas, ocurrió también el primer encuentro de trabajo con las asociaciones de pacientes.
Dos conclusiones resultaron de este encuentro inédito, donde la conversa informal y coloquial fue más productiva que el formato protocolar y rígido característicos de estos encuentros. Gracias al buen tino de la organización, se dejó en manos de las propias asociaciones una definición de hoja de ruta para comenzar un trabajo articulado y conjunto para tener mayor y mejor incidencia en promover políticas públicas de salud.
Un primer acuerdo fue establecer mayor periodicidad de reuniones y elaborar un primer plan de acción que articule la agenda de pacientes y enfermedades con necesidad de acceso a tratamientos innovadores y/o sus bioequivalentes, destacando cánceres y enfermedades raras y huérfanas.
Un segundo acuerdo —para mí el más importante— fue que las asociaciones de pacientes comprendieran que se requieren asociaciones paraguas en cada país y en la región, donde el foco no esté circunscrito a combatir un tipo de enfermedad, sino a mejorar los tratamientos que promuevan una mejor salud para todos.
Esta fase superior de líderes sociales exige que las asociaciones de pacientes, hoy dispersas y fragmentadas, encuentren una visión común que una esfuerzos en una misma agenda país y región, con un nuevo posicionamiento: promover por igual prevención y promoción de la salud, con un combate agresivo e innovador contra las enfermedades de alto costo.
Esta relación fluida y transparente entre sociedad civil organizada, Estado y sector privado permitirá darle sostenibilidad a nuestros sistemas de salud y mejorar sus estándares de calidad y eficacia. Este jueves estaremos expectantes de los acuerdos a los que lleguen los participantes de estos tres sectores en el primer CADE SALUD de nuestra historia en el Perú.
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