Reflexionando por el Perú en Fiestas Patrias

La revista “Reflexionando por el desarrollo del Perú”, que circula hoy con el diario, y que toma en cuenta los 71 artículos publicados en esta columna, donde analizo la problemática social, política y económica por la que atraviesa el Perú, busca informar con objetividad y plantear soluciones que requieren el compromiso de todos, para generar crecimiento económico con desarrollo social, ausente los últimos 20 años.

En nuestros artículos, hemos expresado que no existe posibilidad de desarrollo sin educación de calidad, por lo cual planteamos un modelo construccionista, que reemplace al tradicional memorismo, para que los niños y los jóvenes tengan oportunidad de explorar y de investigar en un mundo cada vez más digital y de cambio permanente.

Ponemos énfasis en la necesidad de un proceso de “Alfabetización Digital en Quechua”, que alcanza a más de 4 millones de personas. Se requiere la inclusión de vocablos de tecnología, de economía y de emprendimiento, generados durante más de 27 años de actividades de desarrollo tecno-digital en distintos lugares del país y particularmente del Ande; ya es tiempo de que nuestros niños y jóvenes estudien y trabajen con la tecnología de la época en que les toca vivir. Para que la Segunda

Reforma Agraria (mejorar productividad) no fracase como la anterior, se debe tener en cuenta el componente lingüístico-tecnológico, lo que disminuiría la pobreza extrema.

Para ello es necesaria la participación del Estado central, los gobiernos regionales y locales, así como también de las empresas mineras, a través de los proyectos de responsabilidad social empresarial que, en las zonas con mayoría de población quechuahablante, deben desarrollarse en quechua actualizado a la Era Digital.

La covid 19 desnudó nuestro sistema sanitario en crisis (200 mil muertos), y los problemas estructurales y de pésima gestión gubernamental que padecemos, en el contexto de una corrupción estructural.

La alta inflación, la crisis alimentaria y el incremento de los combustibles y de los fertilizantes, que son problemas mundiales, deben administrarse con alternativas nacionales que permitan aprovechar nuestra gran biodiversidad, recursos energéticos y minerales: disponemos de 84 de las 117 zonas de vida del planeta, 28 de los 32 climas del mundo, y contamos con energía hidroeléctrica, energías renovables como la solar, eólica y el gas natural. También disponemos de fertilizantes, a través de la roca fosfórica en Bayóvar que se exporta como materia prima y que es la base fundamental para la urea.

Además, Perú dispone de alternativas alimenticias de gran valor nutritivo, como son los cereales andinos y los ingentes recursos del mar más rico del mundo, que deben estar al alcance de la población peruana para solucionar la desnutrición infantil y de gran parte de la población.

El sector Agricultura con sólo 0.7% del PBI, gestiona las políticas de desarrollo de agricultura, que representan el 5.6% del PBI.

Alrededor de 4 millones de personas trabajan en la agricultura, y 2.2 millones son productores de agricultura familiar de subsistencia, con un ingreso promedio mensual familiar (4 personas) de 720 soles; lo que los ubica como un foco de desigualdad extrema en el país.

En Perú, la inflación bordea el 9%, y el componente de la canasta básica de alimentos el 14%, afectando el poder adquisitivo de los peruanos.

Disponemos de reservas suficientes, créditos no usados y posibilidad de endeudamiento, lo que nos posiciona como una de las economías más sólidas de América Latina.

El Gobierno debe adoptar políticas para proteger a la población más vulnerable del país, mediante transferencias directas.

Un desafío adicional es mejorar la cobertura de la vacunación contra la covid-19, para llegar al 70% de la cuarta vacuna, y al 90% de la tercera en todo el territorio nacional, con apoyo de las FFAA.

Para evitar la corrupción, se requiere una nueva ley de contrataciones del Estado, que nazca de estudios de empresas auditoras de prestigio internacional, que evite los clásicos lobbies. También proponemos que Petroperú y Sedapal se conviertan en empresas mixtas, con gerencia privada y auditorías internacionales que generen eficiencia sin corrupción.

Para ahondar en estos y otros temas, les invitamos a revisar el suplemento “Reflexionando por el desarrollo del Perú” en nuestros 201 años de independencia.

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