San Reactiva

De acuerdo al reporte de la SBS de febrero de 2022, en términos del total de créditos empresariales, los programas de gobierno (Reactiva, FAE y PAE) representan el 1% del total de créditos corporativos, 16% de los créditos a grandes empresas, 30% de los créditos a medianas empresas, 20% a pequeñas empresas y 12% a microempresas.

Es por eso que cuando hablamos de los créditos que se otorgaron con “Reactiva Perú” (creado mediante el Decreto Legislativo N°1455) a las empresas, podemos decir que tiene más impacto en las empresas medianas, pequeñas y micro. Muchas de ellas estaban esperando un salvavidas que los ayude a salir de la continua crisis y de hecho lo fue. Pero nadie esperaba que la crisis fuera tan larga y es por eso muchas de ellas se han visto en el último año en la necesidad de solicitar una reprogramación de deudas.

Este 13 de mayo se escucharon sus oraciones y salió el Decreto de Urgencia N°011-2022, que establece medidas en materia económica y financiera destinadas a la reprogramación de los créditos garantizados con el programa “Reactiva Perú” y para financiar actividades de promoción de la inversión privada. Las razones esbozadas en el decreto para extender el programa son muchas, entre ellas: los riesgos vinculados a las tensiones geopolíticas, presiones inflacionarias, la larga duración de la covid-19, la débil recuperación del mercado laboral y el incremento del subempleo. En este contexto se evidencia el riesgo de la disminución de ingresos y la capacidad de pago de los deudores en el sistema financiero.

Sin embargo, debo llamar la atención del Ministerio de Economía (MEF) porque están colocando limitaciones que no deberían, explícitamente han colocado la condición de demostrar una caída en el nivel de ventas mayor o igual al 30% en el 2021 respecto al 2019, pero sólo las ventas no son un indicador de mejora. No necesariamente las empresas que crecieron en ventas crecieron en utilidad, y no necesariamente las empresas que vendieron más ya recibieron los pagos de esas ventas. Pongo un ejemplo del sector salud, todos creen que a todos les fue muy bien, pero, aunque las ventas han sido a entidades como Ministerio de Salud y EsSalud, hay muchos casos que estas ventas se mantienen impagas, por tanto, si estas empresas no pueden acceder a una extensión del crédito pues también quebrarán y no podrán asumir sus pagos a trabajadores ni proveedores.

Esperemos que el MEF pueda corregir esta salvedad pues las empresas que fueron autorizadas al crédito deberían poder reprogramar si es que lo necesitan sin ninguna condición adicional a las que ya tuvieron inicialmente para ser beneficiarias del programa, la crisis todavía esta presente, y San Reactiva es su único salvavidas.

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