Señora Boluarte, no se pase de la raya

¿Cuál es la necesidad de que usted promueva una violación constitucional para poder viajar? ¿Qué lobbies y negociados hay detrás del apoyo de 72 congresistas que, a una sorpresiva velocidad, le han aprobado una ley a la medida? Parecería no molestarle que el Tribunal Constitucional le enmiende la plana, seguramente tomará el primer avión para aprovechar este intermedio de presunta constitucionalidad. Una absoluta vergüenza.

Hay demasiados problemas en el país para que usted esté pensando en pasearse. Deje de lado su afán de figuración internacional, su gobierno está pegado con babas, cuídelo, no se confíe. Ha vivido lo bastante para saber que, en política, la traición está a la vuelta de la esquina. El hecho de que cada día sea más evidente que todos quieren durar hasta el 2026, no evita que algún kamikaze pueda romper ese frágil equilibrio. Además, su representación en el exterior no le hace mayor favor al Perú, los hay mejores. Al final, la prohibición es su mejor excusa para evitar hacer papelones.

Recordemos su penosa intervención en la Asamblea Anual del WEF en mayo de 2022, donde luego de invocar a los empresarios que vengan a invertir en el Perú, garantizándoles todas las facilidades y seguridades, tuvo un discurso oprobioso. Se equivocó de auditorio, señora Boluarte, fue la perfecta Dr. Jekyll y Mr. Hyde. No solo se dedicó a criticar a la industria minera, acusándola de contaminar el medio ambiente, ríos y pastizales, sino que hizo un penoso despliegue de ignorancia al confundir la ubicación geográfica de los grandes proyectos mineros del país.

Estoy segura de que no tenía idea que aportan el 11% al PBI y que hay una cartera de US$60,000M que envejece con cada gobierno, pues nadie se atreve a tocarla y seguirá congelada mientras mantenga como ministro a alguien ajeno al sector. ¿Qué espera para cambiarlo?

Hoy el mayor enemigo del país es la minería ilegal pero jamás le he escuchado decir palabra sobre ella en sus 7 meses de gestión. Estas actividades delictivas mueven 7,000M de dólares al año, de los cuales el Estado no ve un sol. Es muchísimo más rentable que el narcotráfico, pero no tiene la publicidad negativa que merece. Viven en un mundo paralelo donde imponen sus propias reglas. Además del inmenso perjuicio a la economía del país y al entorno donde se desarrollan, está la destrucción de la Amazonía.

La deforestación, a razón de unas 800 hectáreas por año, es una de sus principales consecuencias. Están atacando ecosistemas muy frágiles que impactan no solo en la desaparición de especies animales que son fuente de proteína para muchas comunidades sino en la fertilidad de los suelos. El daño es exponencial. Se hacen operaciones aisladas para combatirlos, pero no se toman medidas valientes y con vocación de permanencia para erradicarla y meter en la cárcel a todos los responsables. Importe el modelo Bukele o cualquiera similar, pero tome acción.

Las regiones más afectadas son Puno y Madre de Dios. Pocos recuerdan que hace unos años, los dueños de La Rinconada - un centro poblado donde malviven más de 40,000 personas entre fango y mercurio, zona liberada para el hampa, la trata de personas y deplorables condiciones de insalubridad- adquirieron en España el fundo Yerbabuena del torero Ortega Cano y no les pasó nada. Todos miraron de costado ante el dinero mal habido, hasta la “super poderosa” Sunat.

Señora Boluarte, gobernar es gestionar, liderar, ocuparse de los problemas de los ciudadanos. No es salir en una foto, ni improvisar. Es coherencia y credibilidad, pero en especial, respetar las instituciones y fortalecer la democracia. La última de sus prioridades debería ser pensar en viajecitos, ya tomará vacaciones cuando concluya su presidencia.

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