Socialismo: el perro del hortelano

No producen, ni dejan que otros produzcan. Machu Picchu es una de las siete maravillas más visitadas a nivel mundial y es el lugar arqueológico más importante y concurrido de Perú. En el 2022, el Santuario Histórico recibió más de un millón de visitantes. Después de la pandemia manipulada, se podía ver la recuperación de la industria turística dentro del país entero.

Sin embargo, estas cifras están muy por debajo de lo que fue el turismo en el 2019. Después de tres años de incertidumbre económica para este sector, aún no podemos asegurar que los ingresos se han recuperado. Cuando respirábamos vientos de cambio para nuestro turismo, aparece la izquierda mediocre y empobrecedora con el discurso manoseado de la “lucha de clases” y “el pueblo oprimido” para terminar con las ansias de recuperación de nuestros micro y pequeños empresarios.

Desde que egresé de San Marcos, siempre me he preguntado, ¿qué ha hecho la izquierda por los pobres? Nada. ¿Qué ha hecho la izquierda para sumar a un crecimiento económico de las regiones turísticas del país? Nada. ¿Qué hizo la izquierda a inicios del 2023, con los negocios de ese grupo informal de trabajadores que tanto dicen “defender”? Destruirlos. Durante los violentos ataques que sufrió el sur del país y en Lima, los únicos que la pasaron realmente mal fueron los informales, los micro y pequeños empresarios. Los izquierdistas chocaron con el bolsillo de aquellos que juraron defender y “luchar”.

Después que la izquierda fue derrotada en las diversas marchas que organizaron -cabe mencionar que las organizaron muy mal, y que en los últimos diez años la izquierda no ha hecho nada bien-; tras perder el poder, se quedaron con una ira contenida que ahora demuestran boicoteando a nuestro país y a los millones de peruanos, que intentan recuperar sus negocios destruidos y afectados por los delincuentes que esa misma izquierda contrató para fastidiar al país. Han pasado casi seis meses desde que los mencionados delincuentes destruyeron Puno y Cusco. ¿Qué buscan ahora? ¿Dividir para vencer? Porque eso es lo único que sabe hacer la izquierda: dividir.

Al finalizar el año 2022, la cantidad de turistas que visitaron nuestro país fue ligeramente superior a dos millones. Si comparamos estas cifras con el flujo de turistas del 2019, tendremos como resultado un 50% menos de las cifras logradas en dicho año. Y aunque a los socialistas odiadores de los gringos les duela en el alma, en 2022, los principales turistas que llegaron a nuestro país fueron, en el porcentaje más alto, los norteamericanos con el 23.1% de participación; luego están nuestros vecinos chilenos, que buscan la riqueza culinaria de nuestro país; asimismo Ecuador, Colombia, Bolivia, España y Brasil.

Las malas noticias son las más fáciles de expandir y son las que llegan con mayor rapidez al continente. Hace pocas semanas recibimos un súper premio por ser considerados el mejor destino culinario del mundo y turístico. Pero a la izquierda, el progreso y éxito individual le genera tal odio que son capaces de destruir lo que otros con mucho esfuerzo han logrado. Los socialistas son como el perro del hortelano, no comen ni dejan comer.

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