Sugerencias para los indecisos

A mes y medio del repechaje, el comunismo se ha ensoberbecido por su triunfo en primera vuelta, dando a entender a su púbico que repetirá el plato en la segunda. Mientras tanto, Keiko Fujimori ha perdido dos semanas para hacer campaña, impedida por un poder Judicial que, a través de sus acciones, tiene todas las características de estar favoreciendo al comunismo. Así como lo hacen la ONPE, la Fiscalía de la Nación y muchas otras reparticiones de este Estado socialista que nos endosaron Ollanta Humala (quien lo inundó de zurdos) y Kuczynski (que les consolidó sus puestos). Hay entonces dados cargados en esta lid que disputarán quienes representan a la destrucción de la democracia y a la socialización a la cubana del Perú; versus quienes defienden la democracia, la libertad y la implantación de un régimen emprendedor con Justicia Social. Para solventar semejante dualidad, los únicos llamados a hacerlo serán los peruanos conscientes de que, o bien se alborozan con que en este país se instale un régimen comunista tal cual existe en Cuba, Venezuela, Nicaragua y Bolivia; o bien ponen el pecho para enfrentar a toda esta morralla de marxistas cargados de resentimiento social y odio personal, que arrasarán con la posibilidad de vivir en democracia y en libertad. Para conseguirlo deberán prestar oídos sordos a sus ofertas de acabar con la pobreza “para crear la igualdad”. ¡Igualdad en la miseria, que es lo sabe hacer la izquierda! Aparte de comprender que esta sería LA ÚLTIMA vez que tendrían la oportunidad de elegir a un presidente NO impuesto por el partido único, tal como lo hacen los regímenes comunistas. Hay más. Usted, amigo lector, que no comulga con los sofismas de los rojos debería saber que si votase en esta oportunidad por Keiko Fujimori -pese a todas esas leyendas negras tejidas alrededor de ella, algunas ciertas, otras inventadas- en cinco años volverá a elegir a otro jefe de Estado en absoluta libertad. ¡Estas son las reglas del juego de la democracia! Cinco años de gobierno, sin posibilidad de reelección inmediata. Mientras tanto, si votase por el comunista Pedro Castillo -y este triunfase- tenga la más absoluta seguridad de que durante décadas usted ya no volverá a votar en libertad. ¡Estas son las normas del comunismo!
Otrosí. Hay gente confundida que considera mejor no votar, como expresión de que con ello da cumplimiento a un rito de libertad personal para hacer lo que le venga en gana. Cierto. Votar en blanco ES una opción. Pero una disyuntiva perversa que, en las actuales circunstancias, le daría el triunfo al comunismo. El esfuerzo de ir a votar, hacer cola, perder tiempo o cualquier otro gesto que le perturbe, amable lector, es una incomodidad absolutamente insignificante frente a lo que le ocurriría como ciudadano en alguna sociedad comunista. Usted sería un individuo sujeto tan sólo a la voluntad de la cúpula comunista que se instale en el país. Usted carecerá de libertad para decidir qué hacer. A usted el régimen le impondrá qué TIENE que hacer. ¡Recuérdelo!

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