Suspicacias sobre gestión en Petroperú se incrementan
Las expectativas de transparencia en las cuentas y la gestión de Petroperu (PP) que generaron el ingreso de Carlos Paredes a la presidencia se han esfumado al cabo de un mes de su permanencia en el cargo.
Parecerá exagerado hacer exigencias en tan corto tiempo. No es así. Antes de asumir la presidencia, ya tenía tres meses de ser integrante del directorio, tiempo más que suficiente para tener clarísimo el escamoteo de cuentas pendientes en el Proyecto de Modernización de Refinería Talara (PMRT) y en las adquisiciones de insumos de producción, petróleo diésel para la comercialización y biocombustibles para la mezcla con gasolinas y diésel que venden. Antes de cumplirse sus primeros 30 días, nos enteramos por una entrevista en un diario económico local de que había llegado a un acuerdo con la contratista de las unidades de refinación del PMRT, la española Técnicas Reunidas SA, para el mantenimiento de la infraestructura construida, que era uno de los varios temas en disputa que constituyen contingencias que pueden incrementar significativamente el monto de inversión declarada anteriormente en 5,000 millones de dólares (MMUS$)
El acuerdo en mención, cuyo monto no ha sido publicado, se rumorea que es de 150 MMUS$. Según las declaraciones del presidente Paredes, había sido comunicado al contralor, Nelson Shack, y al ministro de Economía y Finanzas, Carlos Oliva. Se entiende que avalaron la decisión teniendo como fundamento un informe de una consultora internacional.
¿Así de fácil se manejan las cuentas en las empresas de propiedad estatal? Se ha perdido en PP el concepto del valor del dinero. Para recordárselos, 150 MMUS$ permitirían cubrir los aportes del fisco, bajo el concepto de “recursos ordinarios”, a los presupuestos del 2019 de MINAM, PRODUCE, MINEM, OEFA, SENACE e INACAL y todavía quedarían 19 MMUS$ para otras asignaciones.
La opinión pública necesita saber el detalle de este acuerdo y otros aún pendientes en el PMRT, que suman 874 MMUS$. No solo eso, sino también los procedimientos de compra de crudo, diésel, etanol y biodiesel, que son del orden de 3,700 MMUS$ anuales, hoy en total oscurantismo ante la complacencia del Contralor y del Ministro de Economía.