Un militante, un voto

Víctor Raúl Haya de la Torre, al asumir la Presidencia de la Asamblea Constituyente de 1978 —la que dio fin a la dictadura militar—, citando al político cubano José Martí, dejó una frase que sigue vigente para el Partido Aprista Peruano: “cuando el sufragio es ley, la revolución es el sufragio”.
Fieles a la orientación permanente de Haya de la Torre, los compañeros han optado por que sus primarias cuenten con la participación democrática de todos los apristas, bajo el lema: “un militante, un voto”. El APRA es la única organización, entre todas las existentes, que ha decidido adoptar esta modalidad. Las demás, temerosas y aferradas a caudillismos que afectan la democracia interna, han preferido el método de delegados, una fórmula que muchas veces se utiliza para evitar que el “dueño del partido” pierda una elección.
La decisión de los órganos internos del APRA ha movilizado a miles de militantes a través de sus bases a nivel nacional.
Es justo reconocer que esta organización política, fundada el 20 de septiembre de 1930, es la única en el país que se mantiene activa, a pesar de las persecuciones sufridas en el pasado bajo dictaduras. Además, bajo el liderazgo de Alan García, sucesor de Haya de la Torre, logró llegar al gobierno en dos oportunidades. El acuerdo de “un aprista, un voto” ha reactivado al partido.
Actualmente, el APRA vive una auténtica “revolución del sufragio”, y ya se vislumbran varios candidatos a la presidencia del partido. Entre ellos figuran el joven líder Enrique Valderrama, preparado desde temprana edad en política; la plancha presidida por mi paisano Javier Velásquez, ex premier y ex presidente del Congreso; la de Hernán Garrido Lecca, exministro; y la de Jorge del Castillo, también ex primer ministro y congresista. Es probable que otras listas se inscriban en los próximos días.
Toda esta dinámica “revolucionaria” ha generado confrontaciones dialécticas, propias de la vida democrática, pero siempre dentro del marco de la fraternidad partidaria que caracteriza a los miembros del APRA. El debate ha trascendido las antiguas murallas del partido, circulando libremente en redes sociales y despertando el interés de propios y extraños. Sorprende ver la febril actividad de un partido que muchos daban por muerto.
Estamos seguros de que, conocidos los resultados, quienes obtengan el triunfo serán respaldados por todos los apristas. Los comités activos en todo el país estarán listos para brindar el apoyo necesario a fin de que el APRA vuelva a ser gobierno. Especial atención merece el plan de gobierno de Enrique Valderrama, que aborda con seriedad temas como seguridad, trabajo, educación, economía, entre otros, siempre vinculados con la modernidad que el país exige.
Es importante considerar lo aprobado por el Pleno del JNE mediante la Resolución N.º 0164-2025-JNE. En su capítulo II, sobre democracia interna, se establecen las modalidades obligatorias para la elección de candidatos a la Presidencia y el Congreso, privilegiando el voto universal y directo de afiliados y ciudadanos.
Así estamos, y esperamos unas primarias que den ejemplo y devuelvan la confianza al pueblo del Perú. Porque, como decimos con orgullo: “Este es el APRA, ¿qué les parece?”

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