¡Vacancia, señores congresistas!

Sin ánimo de zahorí o agorero ayer alertábamos de la trampa puesta por el oficialismo. En menos de 24 horas, la luna de miel se convirtió en luna de hiel. Minutos previos a las 10 de la noche del miércoles, el partido de gobierno lanzaba un “pronunciamiento” cargado de explosivos. Esa candidez –como calificamos ayer a la contemporizadora actitud de la novel presidenta del Congreso, María del Carmen Alva, tras haber caído en la celada que le tendieran el premier Torres, el jefe de la bancada de castillistas y demás integrantes oficialistas, dispuestos a cerrar el poder Legislativo para convertir en dictadura al régimen Castillo– confirma que nuestra jefe del Legislativo carece de la sagacidad, el pundonor y la experiencia que tanta falta hacen para enfrentar a este esperpéntico gobierno comunista/senderista, liderado por Vladimir Cerrón y Castillo.

Probablemente fue por estas carencias que la colocase en el cargo Acción Popular; partido que ahora se conduce como auténtico traidor a las claras causas democráticas de todos sus fundadores, encabezados por Fernando Belaunde Terry. Ha sido pues frustrante confirmar la bufonada que protagonizara la señora Alva, al haber caído en el ridículo de abrazar, cual pánfila, a unos siniestros sujetos que le convencieron de la hipótesis que, súbitamente, se habían convertido en demócratas y que, asimismo, abandonaban su credo totalitario y violentista. Tras esa emboscada interpretada por el premier Torres conjuntamente con la cúpula congresal oficialista, asoma la mano de los servicios de inteligencia cubanos operados en Lima por “gallo” Zamora, actual embajador de Cuba en el Perú.

Los términos en que aparece redactado el “pronunciamiento” lanzado por Perú Libre la noche del miércoles, traslucen el manifiesto espíritu antidemocrático y confrontacional de los cerrones y castillos. Para empezar, afirma que no retirará la “moción de censura a la presidenta y primera vicepresidenta del Congreso, toda vez que no existen gestos políticos que fomenten la unidad nacional.” Y tampoco dejará sin efecto la moción de censura contra la señora Alva y otra congresista, acusadas de organizar la vacancia del aún presidente Castillo. Una despreciable conducta que describe a estos mafiosos que un día dicen una cosa y al día siguiente la contraria. Gente inconfiable, tramposa.

Estos hechos eran absolutamente previsibles y evidentes. ¡El comunismo trabaja así! Juega con el doble rasero, aplica la hipocresía y tiende la trampa, como fundamentos para crear condiciones seguras antes de pegar el zarpazo final. En la coyuntura actual su táctica consiste en capturar el poder, denunciando que la oposición obstruccionista no le deja trabajar “a favor del pueblo”. El libreto es conocidísimo. El éxito estriba en la trama para ejecutarlo. Repetimos, por algo Cuba designó a Carlos Rafael Zamora, su ex jefe de Inteligencia desde los años sesenta, mientras operaba el Departamento M-I de la Dirección General de Inteligencia de Cuba (DGIC); además de ser especialista en represión popular. Característica que funcionó como relojito suizo para que Chávez tomase el poder, controlando represivamente al pueblo asesorado por Fidel Castro.

Están notificados, congresistas. ¡O Castillo clausura el Legislativo, o ustedes vacan al tirano!

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