Venganza fiscal contra Ricardo Gómez Palma
El periodista Ricardo Gómez Palma declaró ante el fiscal José Domingo Pérez como parte de la investigación que este sigue en contra de Keiko Fujimori por los aportes ilegales recibidos de Odebrecht y otras fuentes para sus campañas electorales del 2011 y 2016. A consecuencia de esta citación fiscal, RPP suspendió a Gómez Palma, quien tuvo que comparecer ante Pérez por haber realizado un servicio de media training, en el 2015, a precandidatos congresales de Fuerza Popular. Ricardo Gómez Palma cobró 1,500 dólares por su trabajo y emitió el recibo por honorarios correspondiente a la Sunat. No es dable que un periodista asesore a políticos, puesto que, indefectiblemente, a la postre se los cruzará en el ejercicio del oficio, generándose así un conflicto de intereses. ¡O eres periodista o eres relacionista público, no las dos cosas a la vez! A pesar del válido cuestionamiento, Ricardo Gómez Palma no ha cometido ningún delito: otros colegas, como Augusto Álvarez Rodrich, Rosa María Palacios y Gustavo Gorriti, hacen lo mismo y nada pasa. Es más, estos ni siquiera hacen -ni lo harán- el disclaimer respectivo. ¿Por qué, entonces, Gómez Palma fue citado a declarar ante Domingo Pérez por una actividad que prolifera en el medio local? Pues, este conductor radial es una de las pocas voces discordantes -¿la única?- de RPP que cuestiona la labor del Equipo Especial Lava Jato (puro fuego artificial por las prisiones preventivas a granel y ninguna sentencia judicial). Ricardo Gómez Palma tuvo la osadía de mencionar, por ejemplo, que la esposa de Pérez trabajó para el Gobierno del presidente Martín Vizcarra, como directora de Perú Compras. Patricia del Río, indignada por tremendo atrevimiento de su compañero, lo calló en vivo.
Todo está registrado en un video que circula en redes. Así que ya saben, coleguitas, cuidadito con faltarle el respeto al fiscalillo de moda, pues este buscará la forma de amordazarlos con algún escandalete. No se trata de un mero berrinche; es una vil venganza. Gómez Palma, en plena crisis sanitaria y económica, podría perder su empleo en RPP, lo que sería totalmente incoherente si recordamos que el gerente general de esta empresa, Hugo Delgado, recibió 210 mil dólares en efectivo de José Chimpler como pago de la pauta publicitaria de precisamente la campaña de Keiko Fujimori en el 2011.
Por lo antes mencionado, no solidarizarse con el colega afectado es pisotear la libertad de expresión. Después de todo, dice George Orwell, “la libertad de expresión es decir lo que la gente no quiere oír”. Y esa es la labor principal del periodismo (ese que no usa pompones ni aplaude como foca).
