¿ Viraje en política hacia inversión privada?

En el discurso de cierre de Perumin 35, el PCM Aníbal Torres anunció que el Gobierno promoverá la exploración minera para que Perú pueda ser más atractivo a la inversión minera. Asimismo el MEF Burneo ya había reconocido la pérdida de atractivo del país para conseguir inversiones. Es que el Perú se ubica en el puesto 42 como destino atractivo para la inversión minera a nivel global para el 2021, según el Instituto Fraser. Ubicación que se compara muy desfavorablemente con el puesto 14 que tenía en el 2018. Retrocedimos nada menos que 28 ubicaciones en tan solo tres años!!! Por su parte la ministra de Energía y Minas precisó que se ha conformado una comisión sectorial para optimizar el “aprovechamiento de minerales estratégicos, como por ejemplo el litio. Y que ahora debemos reconocer que el crecimiento , la reducción de la pobreza y el retorno al camino del desarrollo van de la mano con una actividad minera moderna”.

¿Estamos ante un viraje gubernamental de la política frente a las inversiones privadas? Aunque sería sensacional si fuera así; por lo que conocemos de la administración Castillo en estos 15 meses de gobierno es prudente esperar y verificar si los hechos siguen a la palabra empeñada, o si solo se trató de discursos para la ocasión. Si bien es cierto que Pedro Castillo está buscando intensamente cualquier fórmula que lo mantenga en el poder y fuera de la cárcel, parece muy difícil que retroceda en aspectos como su objetivo principal de lograr una nueva Constitución, de no seguir buscando el desarrollo del país a través de modelos de fracaso comprobado, como el retorno al Estado empresario, el respeto a los contratos asumidos, y el retroceso en el grave problema generado por el Ministerio de Trabajo y sus dos decretos que modifican sustantivamente las relaciones laborales, etc. En una frase , veo difícil que este gobierno apunte hacia lo que repetía Mario Polar, “tanta actividad privada como sea posible y tanto Estado como sea necesario” . Al margen de las promesas inalcanzables, si verdaderamente el oficialismo deseara recuperar la confianza de los inversionistas privados, lo primero que tendría que asegurarse es que el imperio de la ley esté vigente en todo el territorio nacional. Y no como sucede actualmente, en que hay extensas “zonas liberadas” en las que bandas de maleantes, con la ayuda o supuesta neutralidad del Estado, permiten todo tipo de abusos en contra de la actividad privada. Después de todo no sería la primera vez que los representantes del oficialismo efectúan promesas que se incumplen ante inversionistas privados; como las que efectuara en Washington D.C. durante su primer viaje a EE.UU. el Presidente Castillo, de no estatizar ninguna empresa privada. La que poco después se vio superada por la realidad, como cuando el ese entonces primer ministro Guido Chirinos anunció la estatización de Camisea. Por lo que el Gobierno tiene que entender que su credibilidad es muy reducida, especialmente ante ese grupo-objetivo; el que no creerá hasta que no vea, con hechos concretos, que se ha producido un cambio.

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