Vizcarra convocó

El 11 de abril de 2021 de acuerdo con la Ley Orgánica de Elecciones (Ley No. 26859) se realizarán las Elecciones Generales, de acuerdo con el Artículo 16, que preceptúa “Las Elecciones Generales se realizan cada cinco años, el segundo domingo del mes de abril”.

A menos de una semana para que venza el plazo, el jueves último se publicó en el diario oficial “El Peruano”, el decreto supremo de la convocatoria, como lo prevé el Artículo 80 de la ley, “Corresponde al Presidente de la República iniciar el proceso electoral convocando a Elecciones, mediante Decreto Supremo”; “La convocatoria a Elecciones Generales se hace con anticipación no menor a doscientos setenta (270) días de la fecha del acto electoral” de acuerdo con el Artículo 82 de la citada ley.

Vizcarra tenía plazo hasta el 15 de julio, lo increíble fue el mutis del Legislativo, de los medios guaripoleros, así como del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) y el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec).

El Jurado Nacional de Elecciones tiene a su cargo la fiscalización de la legalidad del proceso electoral y ejerce sus atribuciones con sujeción a su Ley Orgánica y a la Ley Orgánica de Elecciones, la Oficina Nacional de Procesos Electorales organiza y ejecuta el proceso electoral de acuerdo a sus atribuciones y funciones con sujeción a la Constitución Política, la Ley Orgánica de Elecciones y su Ley Orgánica y el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil debe proporcionar, obligatoriamente, a la ONPE, la información requerida por ésta para la actualización de su base de datos para la planificación de los procesos electorales y para el cumplimiento de sus funciones y al JNE la información requerida por éste para ejecutar sus funciones de fiscalización.

Las manecillas del reloj comenzaron a girar, ante la turbulencia y encontronazos entre el Ejecutivo y el Legislativo, que está sin rumbo, por la flagrante inexperiencia de los congresistas, no me cansaré de decir, que un congresista no solo debe de serlo, sino sobre todo parecerlo; ya ni sorprende las idas y venidas con lo referido a la inmunidad, primero no la dan, luego la otorgan y de contrabando y sin ningún análisis le insertan cortapisas nunca debatidas.

Inclusive, la Comisión de Constitución y Reglamento del Congreso no logró el consenso respecto al predictamen que proponía cambiar la fecha de las Elecciones Generales 2021, con el fin de que no sea en abril, sino en mayo, un absurdo del presidente de dicha comisión.

Es hora de que el pueblo piense, recapacite y reflexione, las riendas del país no pueden estar en manos de aventureros que desconocen de constitucionalidad que jamás han leído la Carta Magna y menos el Reglamento del Congreso y contratan asesores que no saben dónde están parados.

El Perú no está para experimentos, se necesita probidad, pero sobre todo decencia y una línea ideológica incólume.