Y ahora ...¿cuáles son las propuestas?

Luego del cierre de inscripciones para poder competir en las elecciones primarias de las agrupaciones políticas que pretenden participar en las próximos comicios generales, y en atención a lo que se evidencia se debe de generar en los venideros días donde, por el alto número de partidos políticos en condiciones de poder presentar candidaturas, tanto a la presidencia de la República como al Parlamento, es obvio que se tendrán que formar alianzas que, entre otras razones, evite la dispersión del voto ciudadano.

Sin necesidad de entrar al campo de la especulación, es evidente que las conversaciones que deben de desarrollarse, con miras a la creación de las referidas alianzas, se van a orientar a definir quién o quiénes formaran parte de la plancha presidencial y, además, bajo qué criterio se van a elaborar las listas de candidatos al Congreso. En consecuencia, todo va a girar en torno a los intereses partidarios y personales. Eso es lo normal y natural que así sea; ello no se puede negar, en el funcionamiento de la dinámica política.

En ese sentido, la pregunta que la población se debe de hacer es: ¿y ahora que proponen las alianzas partidarias para resolver los diversos problemas que aquejan a la sociedad peruana? Al respecto, me temo que, más allá de buenas intenciones, los más de treinta partidos políticos, aptos para entrar en carrera en procura de obtener el poder, carecen de ofertas concretas de cómo y que harían de llegar a obtenerlo.

Está establecida la necesidad que, para postular al manejo de la administración del Estado, es necesario que el partido político presente su “plan de gobierno”, el cual debe ser el resultado del trabajo interno de la organización partidaria, que demuestre que ha identificado cuál es nuestra realidad política, social y económica y, en base a ello, hace propuestas u ofertas concretas que permitan atender con efectividad y eficacia los problemas de ayer, de hoy, y los que, ojalá me equivoque, siempre nos van a afectar.

Estas propuestas u ofertas partidarias son muy importantes para que el ciudadano, antes de emitir su voto, pueda conocerlas y analizarlas, permitiéndole decidir con mayor responsabilidad y criterio político al ejercer su derecho al sufragio. Pues, tal como lo promoviera hace más de quince años el Jurado Nacional de Elecciones el llamado “voto informado”, debe ser el medio o instrumento más idóneo para orientar la conducta política del elector.

Lamentablemente, por la experiencia que se ha tenido durante todo ese tiempo, pareciera ser que existe muy poco interés de parte del ciudadano común y corriente de interiorizarse en materia, para conocer más y mejor todo lo que proponen las agrupaciones políticas, antes de acudir a votar. Por lo tanto, allí está la explicación del porqué aún no se dan a conocer las ofertas electorales.

Si hubiera una mayor responsabilidad de las organizaciones políticas, con miras a participar en una contienda electoral, y para los efectos de juntar “intereses” partidarios, con miras a constituir las alianzas electorales, los temas que deberían de estar en la mesa de discusión son las propuestas que harían cada uno de ellos, respecto a las alternativas de solución de los problemas nacionales y el cómo los van a enfrentar.

Corresponde a la sociedad peruana exigir a las agrupaciones políticas que vayan exhibiendo sus propuestas que, como ofertas electorales ejecutables, se comprometan a hacerlas realidad de llegar a tener a su cargo la administración del país.

Se dice que la esperanza es lo último que se pierde; en ese sentido, nos queda la esperanza que los partidos políticos orienten su camino por esa dirección, que los lleve a conseguir asegurar y proteger el interés general.

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