¿Y por qué no se habla de los delitos que habría cometido Vizcarra?
Karem Roca Luque, otrora asistente del Despacho Presidencial, es la protagonista de varios audios recientemente difundidos, en donde, despechada ella por haber sido desplazada por Mirian Morales, le cuenta a su abogado Fabio Noriega todo lo oscuro que ocurre al interior de Palacio de Gobierno. Lo dicho por Roca Luque debe ser corroborado (son realmente conchudos los palaciegos que, cuando hicieron todo lo contrario en el caso ‘Los Cuellos Blancos del Puerto’, ahora piden que se investigue antes de crucificar) porque, de ser cierto, estaríamos hablando de que se han cometido delitos y confirmando, por ejemplo, la injerencia de Martín Vizcarra en el Ministerio Público a través de Zoraida Ávalos y Domingo Pérez.
Por lo pronto, centrémonos en la grabación en la que se oye a Vizcarra instruir a sus asesores (Roca, Morales y Óscar Vásquez) para mentir ante el Congreso y el Ministerio Público acerca de que Richard Swing visitó “solo dos veces” Palacio de Gobierno y no ocho, como ha revelado la pericia fiscal. Antes de esta conversación, incluso, Morales le dijo a Roca cómo “cubrir” las visitas del músico a la sede del Ejecutivo, como reveló Panorama. De acuerdo a los abogados Enrique Ghersi y Carlos Caro, estaríamos aquí frente a los delitos de obstrucción a la justicia, en primer término, y organización criminal de refilón. Vizcarra, por tanto, deberá rendir cuentas a la justicia apenas ponga un pie fuera de la ‘Casa de Pizarro’. ¿Debería, entonces, ser Martín Vizcarra vacado por el Legislativo para que su proceso judicial se inicie de una vez? Desde esta columna, considero que, si bien hay argumentos sólidos, una vacancia a estas alturas es inútil faltando pocos meses para las elecciones generales, que ya han sido convocadas para abril del siguiente año. Tampoco me parece mejor remedio que la enfermedad tener un Gobierno de este Congreso populista: ¡regalarían todo el tesoro público!
Ahora bien, lo que sí debe ocurrir es que el Presidente acuda al Pleno y comparezca por todo lo revelado. Preocupa, no obstante, que la cuatrinca golpista/humalista del Tribunal Constitucional admita la cautelar que bloquee el proceso de vacancia. Sabemos que Eloy Espinosa-Saldaña, quien ya mostró su interesada premura para que los recursos del Gobierno se resuelvan antes del viernes, tiene 3 votos más con los que conseguiría su nefasto objetivo.
Lo que también debería preocuparnos es la manera en que el IDL maneja la agenda del país. Gorriti saca el sábado un informe (sin audios por cierto) que revela que torpemente Manuel Merino intentó comunicarse con los altos mandos militares para que no intervengan si llegase a ser defenestrado Vizcarra y, de inmediato, el cartel mediático grita “sedición”. Al día siguiente, por supuesto, los diarios de Graña y Mohme calificaron de “golpista” a Merino, pese a que los uniformados salieron chalequeando al premier Walter Martos y a sus ministros en una conferencia de prensa. ¡Solo en países bananeros como el nuestro las FFAA son deliberantes!
En fin, lo que viene ocurriendo no hace más que ratificar lo que declaró meses atrás Beto Ortiz: “Cuando Vizcarra deje el poder, se va a la cárcel”.
