ÚLTIMA HORA
PUBLICIDAD

¡Yo me rebelo!

Imagen
Fecha Publicación: 18/05/2021 - 20:20
Escucha esta nota

El momento que vivimos es muy incierto. Cuando veo que las encuestas favorecen al candidato radical, como posible gobernante de nuestro país, tengo sentimientos encontrados y uno de ellos es la rebeldía.
Me rebelo a creer que poco o nada ha valido lo logrado durante tantos años de trabajo y esfuerzo, viniendo desde abajo, para que ahora ante la amenaza de un gobierno comunista podamos perderlo todo.
Provengo de una familia provinciana, honesta y trabajadora. Mis padres, con ocho hijos a los que tuvieron que criar, alimentar, vestir y educar, sólo pudieron lograrlo trabajando muy fuerte.
Vinimos de Piura cuando yo tenía tres años. Nuestros primeros años en Lima no fueron fáciles. Pero cualquier penuria se minimizaba con el inmenso cariño y amor que recibimos. Recuerdo que esperábamos la gratificación de fiestas patrias de mi padre para cambiar de zapatos, los que por las pichanguitas en la calle terminaban con huequitos, que tapábamos con cartón para protegernos de la humedad, hasta que llegaran las nuevas “tabas”. Mi padre después de su trabajo se “cachueleaba” con otras chambitas. Mi madre para contribuir con la economía familiar. sin salir de casa, se ganaba su platita cosiendo vestidos para una tienda,
El Estado contribuyó en brindarnos una educación pública de calidad que permitió ponernos en igualdad de condiciones que cualquier estudiante de un buen colegio privado. Algunos de mis hermanos salieron del colegio con alguna formación técnica que hizo posible que, al terminar el colegio, pudieran generar ingresos inmediatamente. Otros pudimos ingresar a universidades nacionales para formarnos profesionalmente y acceder así a puestos mejor remunerados.
Mis hermanos y yo, siguiendo el ejemplo de nuestros padres, siempre hemos aspirado a mejorar como personas, crecer laboralmente para poder dar una mejor calidad de vida a nuestras familias y también nos dimos tiempo para contribuir con nuestra sociedad. Todo lo que hemos logrado en la vida nos lo hemos ganado con mucho esfuerzo.
Por eso me rebelo ahora ante la posibilidad de que una de las dos opciones, que tenemos para elegir, pretenda imponernos un modelo económico comunista que sólo ha demostrado “capacidad” para empobrecer a los hermanos de países vecinos. La igualdad debería darse apuntando a que todos mejoremos, pero no quitándole a otros.
Me rebelo a creer que, teniendo la posibilidad de seguir viviendo en libertad y en democracia, elijamos una opción radical que nos lleve a caminar por senderos peligrosos.
Me rebelo ante la insensibilidad de dos décadas de la clase política, que hoy pone en el ciudadano la responsabilidad de votar, apretando los dientes, para darnos la posibilidad de llegar a gobernar, exigiéndonos cambiar el rumbo para lograr disminuir las tremendas brechas sociales que nos separan y enfrentan.
¡Rebelémonos votando por el Perú!

Para más información, adquiere nuestra versión impresa o suscríbete a nuestra versión digital AQUÍ.

Puedes encontrar más contenido como este siguiéndonos en nuestras redes sociales de Facebook, Twitter Instagram.