Comunicado que sí comunica

Hace unos días leí con beneplácito un Comunicado del Departamento de Recursos Humanos del Congreso donde se les recordaba a los empleados del Parlamento, que laboran en el Servicio Parlamentario y en los despachos de los congresistas, las normas básicas disciplinarias relacionadas a la imagen que deben transmitir dentro y fuera de las instalaciones del Congreso y del uso adecuado de los recursos que se les asigna para realizar sus funciones.
Este comunicado que, a todas luces obedece a una disposición superior desde la presidencia del Congreso, deja entrever la preocupación de las autoridades parlamentarias para devolverle a la institución la majestad que ha venido perdiendo con el transcurrir de los años.

Recuerdo por ejemplo que, en el Senado de la República, el doctor Lizardo Ugarte del Pino, Oficial Mayor de la época, se paraba en la puerta del Congreso, junto con el señor Manuel Stagnaro, jefe del Personal, para supervisar si los empleados llegaban con la vestimenta adecuada, porque de lo contrario no ingresaban a laborar. En esos años los empleados tenían la misión de realzar la imagen de la institución en que trabajaban y no, como al parecer sucede ahora en algunos de ellos, que tratan de deteriorar la imagen del Parlamento en desmedro de ellos mismos, ya que no entienden que si la institución es bien vista ellos también serán bien vistos.

Sin embargo, debo ser claro en resaltar que la imagen del Congreso no es solo responsabilidad de los empleados sino sobre todo de los parlamentarios, la cual no solo depende del atuendo con el que vayan a trabajar sino de la conducta pública y privada que deben mantener para darle prestancia al rol que tienen en la institución que representan.

Pero ojo, la comunidad parlamentaria alcanza también a los visitantes, periodistas y funcionarios del Gobierno que asisten al Congreso y que deben observar también las reglas de convivencia adecuada para darle prestancia al Parlamento.

En ese sentido, sugiero que en la página web del Congreso y en las puertas de acceso al púbico, se publique y entreguen a los visitantes las normas de conducta que deben respetar para mejorar la imagen del Congreso, con el mensaje claro de que “respetando al Parlamento se respetan a ellos mismos y con ello la del Parlamento de nuestro país”.

Saludo la iniciativa del Congreso en establecer una campaña permanente para mejorar la imagen del Congreso.

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