Consejo hasta de un conejo III - tú ya no eres tú
Hace algunos años escribí un par de columnas denominadas “Consejos hasta de un Conejo I y II” y abordé el tema de los ayayeros en la política, en el que de una manera divertida describía a ese personaje que existe y encanta tener a casi todos los políticos. Hoy retomo dicha saga y empiezo con el tema “Tú ya no eres Tú”.
El político ya no es él como persona. Toda persona que ejerce un cargo, sea en el Congreso, Poder Ejecutivo o Judicial, o en cualquier parte de la estructura pública o privada, ejerce política y, al ejercerla, ejerce poder, y muchas personas que están alrededor de ellas quieren beneficiarse del poder de la persona. Una de las maneras de buscar beneficio es tomándose una fotografía, por ejemplo, con el fin de mal utilizarla y demostrar que está cerca del poder; aquí la persona que ejerce el poder debe estar alerta a este tipo de acciones y posar en la fotografía de una manera que transmita que esa persona no es su amiga, y mantener alguna distancia prudente. De ser el caso, ni siquiera sonreír. El ejemplo descrito también puede extenderse para los mensajes de texto, videos y correos electrónicos, ya que pueden ser editados, generando también una mala utilización en beneficio de la perversidad.
Ahora bien, cuando escribo la frase “Tú ya no eres Tú”, me estoy refiriendo a que las personas que ejercen poder deben saber que están sujetas al escrutinio público y que, cuanto más se expongan ante los medios de comunicación, serán más vulnerables, por lo que deben tener una conducta prudente e intachable, pública y privada, para no generar percepciones negativas que a la larga se convierten en realidades. Una mala o buena percepción será recordada como una realidad, por lo que afirmo que las percepciones se convierten en realidades.
Algunas personas que ejercen poder son amantes de los adulones y les encanta estar rodeados de gente que también les gusta figurar, poniéndose, por ejemplo, detrás del poderoso cuando las cámaras de televisión los abordan. Aquí también la recomendación es que solo debe aparecer en el enfoque de la cámara el protagonista y no, como decía una gran amiga de la alta política, los “huele guisos” que nada tienen que ver con quien está dando la declaración televisiva.
Todo esto que les acabo de describir forma parte de la formación política. Usted, amigo lector, ¿se está formando para ser un político profesional?
Mira más contenidos siguiéndonos en Facebook, X, Instagram, TikTok y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.