Despierten, basta de letargo

Recientemente a través de las redes sociales, me llegó un párrafo muy aleccionador del discurso de Nikita Khrushchev, pronunciado en su carácter de máxima autoridad de la entonces Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. El discurso lo fue en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York el 29 de septiembre de 1959, hace más de sesenta años.
El jerarca ruso de la URSS en aquella oportunidad en que, por supuesto aún no había caído la “cortina de hierro”, manifestó que “…Los hijos de tus hijos vivirán bajo el comunismo. Ustedes los occidentales son tan crédulos que no aceptarán el comunismo directamente, pero seguiremos alimentándolos con pequeñas dosis de socialismo hasta que finalmente despertarán y descubrirán que ya tienen comunismo para siempre. No tendremos que pelear contra ustedes... La Democracia dejará de existir cuando les quiten a los que están dispuestos a trabajar y se los den a aquellos que no…”.
Las paradojas que tiene la vida y la historia. Quienes se prodigaban en exaltar las supuestas bondades del comunismo tratando que el resto del mundo se contagie con sus absurdas teorías y peor praxis, fueron dejándolo de lado y asumiendo los beneficios del sistema occidental de la economía de mercado y social de mercado, que les está permitiendo elevar los niveles de vida de su población.
Otros países que estaban lejos del comunismo como Cuba, Nicaragua y Venezuela, en alguna medida lo adoptaron y antes que salir de sus problemas, han retrocedido y tienen a sus ciudadanos condenados a la pobreza económica y a la esclavitud política y social. Entre los países que profesaban el comunismo pero comenzaron a abrir los ojos e irles muchísimo mejor, tenemos a la Federación Rusa y la República Popular China, que en la economía son liberales aunque en lo político aun autoritarios. Desde que abrieron los ojos y cambiaron modelo, se han convertido en adalides de la libre economía que les ha permitido convertirse en potencias económicas y no solo militares como fueron antaño.
Incluso hay países que adoptaron el sistema occidental, tanto en lo económico como en lo político y hoy son referentes que marcan paso. Como ejemplos tenemos a Polonia, Hungría, República Checa y tantos otros de Europa, siendo bueno recordar el caso de Corea en el sudeste asiático, en que la población de Corea del Norte sigue sufriendo penurias, pese al poderío bélico, mientras Corea del Sur es hoy día bastión económico en que su población ha superado ampliamente inequidades y miserias.
En nuestro querido Perú la población ha estado dormitando, aletargada y amodorrada, tanto es así que no vio lo que pasaba en el mundo y creyó los cantos de sirena de quienes desean llevarnos al comunismo, dejando de lado la buena senda de los últimos treinta años, que nos ha permitido encauzarnos en el desarrollo, reducción de pobreza, aumento de clase media y satisfacción de necesidades, así como ampliación del mercado laboral. No perdamos los avances por más que la pandemia y el confinamiento nos hayan atontado. Es hora de despertar.

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