Gobierno de acomplejados
Según el premier Aníbal Torres el gobierno de Pedro Castillo es parte de una “izquierda inteligente”. Tal cosa no existe porque en todos los lugares donde se enquista la izquierda solo se destruye la economía, desperdicia recursos, degrada el medio ambiente, se genera violencia, muerte y miseria, profundizando la corrupción, la impunidad y la desigualdad. La izquierda, además, ha impulsado gigantescas diásporas como la cubana o venezolana. Solo entre 1994 y 2015 fuentes confiables calculan que 10% de la población cubana (un millón de personas) abandonó la isla comunista en balsas; y para 2018 Venezuela se había vaciado de 20% de sus ciudadanos. Así huye la gente de la “izquierda inteligente” existente solo en la cabeza del premier.
El gobierno de Castillo es “de acomplejados”, y esto no es un problema menor; de hecho, las dos grandes guerras tuvieron como cabezas a individuos que padecían profundos complejos de inferioridad, como Adolfo Hitler en el caso de la II Guerra Mundial. Hoy mismo el orden mundial y la posibilidad de una guerra nuclear, química o biológica “está en manos de un solo hombre (Putin) con sus fobias, filias, manías y delirios”, escribe Javier Antequera en el Diario 16, de España. Y cita al psicólogo forense Javier Urra quien “considera que el presidente ruso no soporta a los débiles, de modo que tras comprobar la vulnerabilidad de Occidente ha decidido lanzar un órdago en toda regla.
Putin sería como un niño que se sabe “no querido”, pero al que todos temen. Ese complejo de inferioridad es un rasgo común a muchos dictadores”.
El sentimiento de inferioridad que aqueja al gobernante y a la gente que le rodea es un sentimiento doloroso. Según el médico y psicoterapeuta vienés Alfred Adler (1870-1937), los humanos tienden a compensar y hasta sobrecompensar el complejo de inferioridad. Quien se siente excluido quiere incluirse, inclusive excluyendo a los otros y quien cree haber sido humillado solo busca vengarse. Estas son algunas maneras de cómo aparece el afán de poder o de superioridad, algo anormal en una persona psicológicamente estable.
Adler relaciona el afán de poder con el sentimiento de inferioridad, y sabiendo que este es un gobierno de personas con sentimiento de inferioridad y exclusión buscarán el poder total. La reciente propuesta de cerrar el Congreso no es casual.
Castillo y sus acomplejados tienen en común no haber alcanzado reconocimiento mediante sus profesiones u oficios y creen que el mundo (los limeños, los ricos, los exitosos, los blancos y un largo etcétera) les negaron el lugar expectante que según su defensa ególatra merecían. Es obvio contra quiénes dirigirán su acción política y que no harán algo para que “el pueblo” prospere, por lo pronto ya les fregaron la campaña agrícola 2022 por falta de urea y fertilizantes.
Detrás de las estructuras mentales de estos acomplejados está la verdadera agenda del gobierno.
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