La inhabilitación presidencial es viable

De una interpretación sistemática de los artículos 97°, 99°, 100°, 113°, 117° de la Constitución, y demás normas concordantes, es viable inhabilitar al presidente Castillo, con mayoría simple de votos del Pleno del Congreso; para lo cual sólo hace falta VOLUNTAD POLÍTICA, la cual, infelizmente, está supeditada a los repugnantes intereses de los políticos tradicionales relacionados, sobre todo, con beneficios materiales e impunidad en las investigaciones y procesos penales.

Efectivamente, el artículo 97° establece que el Congreso podría iniciar investigación sobre cualquier asunto de interés público, siendo obligatorio que el Presidente comparezca ante la comisión investigadora que lo requiera, lo cual, como ya sabemos, Castillo se ha negado a hacerlo, obstaculizando e impidiendo el funcionamiento de la Comisión de Fiscalización del Congreso. Entonces, en aplicación del artículo 99°, ante la renuencia y reiterada actitud obstaculizadora, la Comisión Permanente podría acusar al presidente ante el Congreso por infracción constitucional.

El numeral 5 del artículo 100° de la Carta Magna dispone que la presidencia vaca por destitución, que en este caso sería por la infracción constitucional a que se refiere el artículo 117° de la Constitución, al obstaculizar e impedir el funcionamiento del Congreso.

Entonces, en aplicación del artículo 100°, corresponde al Congreso inhabilitar al Presidente para el ejercicio de la función pública hasta por diez años. Así, una vez resuelto acusarlo por infracción de contenido penal, el Fiscal de la Nación formulará, en un plazo de cinco días, denuncia ante la Corte Suprema, siendo el vocal supremo penal el que le incoe la instrucción correspondiente.

Un escenario de destitución similar ya fue planteada por la Dra. Beatriz Mejía Mori, mediante su artículo “Causales de destitución del Presidente”, publicado en el Diario Expreso, el 14 de marzo de 2019, para que se le destituya al entonces presidente Vizcarra, quien habría estado incurso en transgresión sistemática a la prohibición de impedir el funcionamiento del Congreso, a través de una campaña de desprestigio mediático, encuestas distorsionadas, persecución de los opositores congresales, calificándolos de ineficientes y corruptos, incitando el repudio social mediante arengas para que se le cierre.

Quijotes, salidas constitucionales existen varias, pero todas dependen de obtener la votación suficiente en el pleno del Congreso. Sin embargo, en estos días, lamentablemente, posiblemente, veremos a Los Innecesarios conformando asolapadas, insospechadas alianzas, pactando impunidad.

Hermanos peruanos, deseo equivocarme, pero lamentablemente, ante el escenario de inhabilitación y destitución del presidente Castillo, creo que nuevamente seremos traicionados por los padrastros de la patria, no alcanzando siquiera la mayoría simple.

Reitero, la salida de Castillo no pasará por el Congreso sino por el rugir de las Calles… mientras eso no ocurra, cada molécula de mi ser seguirá clamando por la ¡Jubilación Política del Pollino Castillo!

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