¿Pandemia con Castillo?
El régimen de Castillo destruye al Perú como si quisiera hacerlo inviable, una nación fallida. Mientras tanto, la pandemia no ha terminado y una nueva ola amenaza al planeta. Antes o después orillará en nuestro país y es fácil imaginar la catástrofe sanitaria y el caos social que desencadenará. Un nuevo ataque del virus chino, cada vez más potente y contagioso, nos llevará a la anarquía total, a los saqueos y a la barbarie, si este (des)gobierno con prontuario retiene el poder. Sacudirse del cerrón-castillismo y los suyos es imperativo para la supervivencia, ya no de la democracia sino de los peruanos, es decir de nosotros mismos.
El director general de la Organización Mundial de la Salud, OMS, el etíope Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha sido enfático al señalar que la pandemia no ha terminado, refiriéndose a los crecientes contagios en Asia y al repunte de casos en Europa. Tedros informó que “algunos países están sufriendo las tasas de mortalidad más altas, desde el inicio de la pandemia”. La misma OMS advierte que “el virus se está propagando a un nivel intenso en todo el mundo (por) la aparición de variantes preocupantes altamente transmisibles”.
China cerró ciudades como Shanghái (25 millones de habitantes), Jillin, Shenzhen, Langfang, Dongguan y Hong Kong, entre otras, bajo su política de “cero covid” que intenta, inútilmente, eliminar los contagios con duros confinamientos, pruebas masivas y restricciones de viajes, separando inclusive a los niños de sus padres. A la fecha 400 millones de personas están confinadas. Según el experto en enfermedades infecciosas, Zhang Wenhong, los brotes recientes son “el periodo más difícil en los últimos dos años de lucha contra la covid”. Desde principios del año China registró más casos de contagio que en todo 2021. Otro país que vive un rebrote es Gran Bretaña con la cepa mutante XE y especialmente la altamente contagiosa variante Ómicron BA.2 y otras como la muy virulenta BA.1.2.1., que viene afectando al gigante asiático.
En nuestro país, en medio de pugnas político partidarias, con un Vladimir Cerrón tratando de dominar el sector salud, los contagios siguen escalando. El promedio es de 658 nuevos contagios diarios, según data de Reuters y la tendencia es al alza. Desde el principio de la pandemia en 2020, nuestro país tiene acumulados 3’558,613 contagios (más de 10% de la población) y 212,715 fallecidos por coronavirus (cerca del 9% de los infectados).
El virólogo cubano Manuel Cano estima que las nuevas variantes infectarán a 30% de la población mundial, lo que en nuestro país significa más de nueve millones de personas, y que como mínimo el 1% requerirá cuidados intensivos, esto es más de 300 mil compatriotas.
Ante el preocupante panorama, ¿permitiremos que estos ineptos y cleptómanos estén a cargo cuando reviente la temible próxima ola de la pandemia? No, gracias.
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