Pelea en el castillo

Que el dólar baje 21 céntimos es bueno, aunque el descenso no será franco ni sostenido. Peor aún, los precios no bajarán como el atribulado consumidor quiere. Enfrentar a los comerciantes con los consumidores –como quiso el ex-Premier Bellido– es inútil cuando el balón de gas está a 54 soles. Sumado a ello, Bloomberg señala que “la incertidumbre política se mantendrá alta” y prevé un PBI del 2% para el 2021. Nada auspicioso.

S&P Global Ratings redujo a negativa la perspectiva de la calificación crediticia del Perú. Nada halagüeño. Betssy Chávez, la sucesora del extitular de Trabajo, Íber Maraví (Conare-Sute), seguirá la llamada “Agenda 19” que dejó el renunciante ministro.

Se crearán sindicatos pro-Movadef y avanzará la extrema izquierda. El Ministerio de Educación pronto será una ‘cangrejera’ senderista.
El Ministerio del Interior parece estar tomado por el hampa.

La Premier Mirtha Vásquez, antiminera, favorable a una Constituyente, no ha dicho ni pío sobre Camisea, la erradicación de la hoja de coca y tantos otros temas álgidos para el país. Si el Congreso le da la confianza a este gabinete cavará su propia y pronta tumba.

En medio de la tragedia que vive el Perú, el sector mayoritario de la bancada de Perú Libre le ‘paró el macho’ a Castillo. No le darán la confianza a Mirtha Vásquez; no estuvo en la campaña y se la lleva fácil, sostienen. También fustigan a las ministras Dina Boluarte y Betssy Chávez, les dicen ¡fo! Será un despelote rojo. ¿Llegará la sangre al río? Cómo saberlo. El accionar de Castillo es clandestino, sinuoso y taimado. No habla con la prensa, la tiene –literalmente– en la calle. Está prohibido su ingreso a Palacio de Gobierno.

Del grupete de marxistas leninistas que llegó al poder con fraude, el más inepto es Castillo. Torpe en su hablar, sin ideas claras, ligado al Movadef. Pero tan chancado por Vladimir Cerrón no está. Metió al Ministerio del Interior a un cuestionado y oscuro personaje, y a Educación a un maestro del Fenatep, contrario a la meritocracia en el magisterio, a la educación privada, entre otros. Del resto de ministros sabemos poco.

Conocemos, de relancina, que Bruno Pacheco, secretario de Palacio, ‘renuncia’ a los ministros por ‘wasap’; que Castillo se reúne con Movadef, Fenatep y el Partido Magisterial Popular en Palacio; que sigue despachando en Breña de modo secretísimo, y que duerme en Chorrillos, donde vive su familia.

Seguir pensando que pulverizando a Cerrón el malo, Castillo se reformará, es cegarse. Todos, peleados o no, promueven la Constituyente. El odio a Keiko Fujimori envileció demasiado a un sector que terminó eligiendo a un profesor funesto vinculado a Sendero y que está destruyendo al país. Con el agravante de que “la China” repudia frontalmente al terrorismo. Probablemente implosionarán entre ellos. Punto para el Perú.

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